El Rey ha reivindicado este lunes el éxito del proceso de construcción de la Unión Europea y ha advertido de que todos los pueblos y países deben involucrarse en hacer frente a los grandes retos globales y "ninguno debe esconderse en el aislamiento".

Felipe VI ha lanzado este mensaje en la inauguración de la 14 cumbre de ministros de Asuntos Exteriores ASEM, que reúne durante toda la jornada a medio centenar de representantes de los países de la Unión Europea y de Asia en el Palacio Real de El Pardo.

Acto en el que ha estado presente el exministro de Asuntos Exteriores y actual Alto Representante para la Política Exterior y de Seguridad de la UE, Josep Borrell, así como quien ha asumido su cartera como jefa de la diplomacia española, Margarita Robles.

El Rey, en una intervención casi en su totalidad en inglés, ha considerado el foro ASEM como un marco ideal para debatir y presentar nuevas ideas o propuestas en un momento crucial de la historia.

Un tiempo que ha dicho que está caracterizado por grandes desafíos regionales y globales, así como por la rápida transformación de los paradigmas tecnológicos.

"Todos los pueblos y todos los países deben estar preocupados e involucrados; ninguno debe esconderse en el aislamiento y pensar que uno puede hacerlo bien si no está comprometido o adoptando un enfoque introvertido ante los riesgos y desafíos actuales como la migración, el cambio climático, la criminalidad o las crisis financieras que no respetan ni se detienen en ninguna frontera", ha añadido.

Frente a ello ha insistido en que los problemas sólo pueden resolverse mediante el multilateralismo y el respeto al orden internacional fundamentado en unas reglas que encarnan iniciativas como la ASEM.

En esa línea y a poco más de un mes de que pueda hacerse efectivo el Brexit, el Rey ha destacado que los europeos, y los españoles en particular, saben por experiencia propia las virtudes de la conectividad entre países, que ha considerado que es el concepto central "del que es el proyecto de construcción e integración más exitoso hasta la fecha, la Unión Europea".

Ha subrayado además que el hecho de que España acoja esta reunión es consecuencia de su "incuestionable apertura" hacia el resto del mundo" y una prueba inequívoca de su compromiso con un multilateralismo eficaz y proactivo en la gobernanza mundial.

Algo que cree que se ha demostrado también ofreciendo Madrid como sede de la cumbre del clima COP25.

Felipe VI ha considerado a la ASEM como uno de los procesos de diálogo internacional más prestigiosos y consolidados y ha aprovechado para ratificar la validez de Agenda 2030 y del Acuerdo de París sobre el clima como instrumentos que contribuyen a la paz, la seguridad y la prosperidad y proporcionan soluciones.

También ha apelado a la ONU para actuar de manera ágil, eficaz y transparente buscando soluciones innovadoras y prestando atención a las aspiraciones y necesidades de los ciudadanos sin dejar a nadie atrás.

En este sentido, ha señalado que el Gobierno español considera que el multilateralismo efectivo, transparente e inclusivo debe fundirse en la perspectiva de género, momento en el que ha defendido la participación de las mujeres como agentes de paz en todas las etapas de los conflictos.