La Policía de Bielorrusia ha detenido este domingo a 327 manifestantes en una nueva jornada de multitudinarias protestas en la capital de Bielorrusia, Minsk, contra el presidente del país, Alexander Lukashenko, según ha denunciado la ONG local pro Derechos Humanos Viasna.

La mayoría de los arrestos se han producido en Minsk e incluyen a más de 40 periodistas bielorrusos y también extranjeros durante la manifestación que por noveno fin de semana consecutivo, exige la dimisión del presidente por su, denuncian los participantes, fraudulenta victoria en las elecciones de agosto.

El Ministerio del Interior no ha proporcionado por el momento datos oficiales de arrestos, aunque ha informado de "decenas" de detenidos en la ciudad de Minsk. Según informa el portal de noticias Tut, la Policía ha hecho uso de granadas de conmoción, gases lacrimógenos y ha cargado contra los participantes cuando se dirigían al centro de la capital.

Según testigos, fuerzas de seguridad vestidas de negro golpearon a los manifestantes y les llevaron a pequeños autobuses. Imágenes captadas por los asistentes han captado además a varias personas heridas con la cabeza vendada, sentadas en el suelo.

Los observadores han denunciado también que la red de telefonía móvil se ha cortado en varios momentos y que algunas estaciones de metro fueron cerradas para restringir la afluencia de participantes.

Lukashenko, de 66 años, ha liderado Bielorrusia, una ex república soviética entre Rusia y Polonia y un estado miembro de la UE, durante más de un cuarto de siglo, tolerando poca disidencia. Los partidarios de la oposición alegan que las elecciones de agosto fueron manipuladas y que Tijanovskaya, de 38 años, ha sido la verdadera ganadora. La Unión Europea ha descrito las elecciones como "ni libres ni justas" y se ha negado a reconocer a Lukashenko como presidente.