Las protestas han continuado este viernes en Perú con nuevos choques entre manifestantes y Policía, mientras que el presidente y el gerente del Instituto de Radio Nacional de Perú (IRTP) han dimitido tras denunciar un intento de "censurar y manipular" la cobertura de las protestas.

Renzo Mazzei, que hasta este viernes era el gerente del ente público de telecomunicaciones, ha dejado su puesto tras denunciar que un "colaborador de confianza" del nuevo presidente, Manuel Merino, le llamó para pedir que la televisión pública no emitiera las movilizaciones ciudadanas del pasado lunes, según ha recogido 'El Comercio'.

Tras la dimisión de Mazzei y del presidente ejecutivo del organismo, Eduardo Guzmán, los periodistas de TV Perú han leído un comunicado en directo en el que han lamentado por la salida de los directivos y han defendido la televisión pública "de calidad" propia de los "medios de comunicación públicos administrados en democracia".

Choques frente a la casa presidencial

Las manifestaciones contra el cese del anterior presidente, Martín Vizcarra, en una moción de censura impulsada por sus opositores tras conocerse varias acusaciones de corrupción contra él, han continuado con choques entre Policía y manifestantes cerca de la casa del nuevo primer ministro en La Molina, un distrito de Lima.

Numerosos protestantes han acudido a los alrededores de la casa del nuevo primer ministro, Ántero Flores-Aráoz, en cuyos aledaños han chocado con un grupo de antidisturbios que han dispersado a los protestantes.

Naciones Unidas ha condenado el desempeño de las fuerzas de seguridad peruanas en la disolución de las manifestaciones por su uso de la fuerza contra manifestantes pacíficos y el ministro de Interior, Gastón Rodríguez, ha sido citado a comparecer en el Congreso el próximo domingo, según la emisora RPP.

Un antes y un después

La crisis política que atraviesa Perú alcanzó un nuevo pico con la destitución de Vizcarra el lunes en una moción que aupó al poder al entonces presidente de la Congreso, Manuel Merino.

Vizcarra ya había sustituido en 2018 a Pedro Pablo Kuczynski, que dimitió tras ser acusado de estar envuelto en una trama de corrupción urbanística vinculada al caso Lava Jato.

El nuevo gobierno debe ahora recibir el voto de confianza del Congreso, un trámite en el que varios partidos han asegurado por adelantado que no apoyarán a Flores-Aráoz.

Este Gobierno llevaría a cabo la gestión de la pandemia y la preparación de cara a las elecciones presidenciales que están previstas en abril de 2021.