El comité designado por el presidente de EEUU, Donald Trump, para organizar su investidura en enero de 2017 pagó una factura por 49.000 dólares que debía haber asumido la empresa privada del gobernante, denunció este lunes el fiscal general del Distrito de Columbia, Karl Racine.

Según el diario The Washington Post, Racine agregó la acusación a una demanda que interpuso en enero de 2020 contra el llamado Comité de Investidura Presidencial por "abusar de fondos sin ánimo de lucro para enriquecer" a la familia del mandatario. "La Organización Trump era responsable de los cargos facturados", indicó la oficina del fiscal, según el expediente, que considera el pago de la factura "injusto, no razonable e injustificado, y (que), en última instancia, confirió un beneficio privado impropio a la Organización Trump".

El fiscal indicó que la Organización Trump no pagó una factura de hotel por 49.000 dólares, la cual terminó en una agencia de cobros y que el Comité de Investidura Presidencial, una organización sin ánimo de lucro, finalmente sufragó.

En enero del año pasado, Racine indicó en su demanda que el comité se coordinó con la familia de Trump para pagar 1,03 millones de dólares por el alquiler de un espacio en el hotel, que incluía un salón de baile y salas de reuniones, muy por encima de las tarifas del establecimiento.

Racine pidió ahora a un juez que ordene que los 1,03 millones de dólares pagados al hotel Trump y los 49.000 dólares de la factura se destinen a la caridad.

En la nueva acusación se detalla que un empleado de la Organización Trump que era asistente de Donald Trump Jr. reservó en ese entonces habitaciones en un hotel ubicado a pocas manzanas de la Casa Blanca.

Según el fiscal, el contrato fue ejecutado "en nombre de la Organización Trump" por Gentry Beach, un amigo de Donald Trump Jr., que no es empleado del negocio del gobernante.

La factura por 49.358,92 dólares fue enviada a la Organización Trump y quedó sin pagar hasta julio de 2017, cuando una agencia de cobros contactó al comité, que hasta entonces desconocía de las habitaciones, pero que asumió el pago tras una orden de Rick Gates, quien fue "número dos" de la campaña electoral del ahora presidente.

En un correo al Post, Beach dijo no estar al tanto de los hechos. "No sé nada de las habitaciones, no usé las habitaciones, no tengo idea de quién lo habría hecho", apuntó y aseguró no saber quién usó su nombre.

En diciembre de 2019, Gates fue condenado a 45 días en prisión y tres años de libertad condicional por fraude y por mentir a los investigadores tras finalmente admitir que había ayudado al jefe de campaña de Trump, Paul Manafort, a esconder 75 millones de dólares obtenidos por trabajos de consultoría para políticos ucranianos en cuentas en el extranjero.