Al menos 20 personas han sido detenidas este sábado durante una manifestación contra el confinamiento celebrada en Dublín, la capital de Irlanda, tras los graves disturbios ocurridos. Cientos de personas han participado en la protesta.

Durante la protesta se han podido ver numerosas banderas de Irlanda y se han repartido panfletos del Partido Nacional, una formación de ultraderecha. La mayoría de los participantes no llevaban mascarilla.

El primer ministro irlandés, Micheál Martin, ha condenado la violencia, "un riesgo inaceptable tanto para la población como para los policías". "Esta gran concentración en vista de las restricciones COVID-19 demuestra una absoluta falta de respeto para la gente que ha hecho enormes sacrificios durante esta pandemia", ha añadido.

"No podemos tolerar el matonismo ni los ataques contra los policías que tienen el máximo respeto de la población por proteger y servir a nuestra sociedad en estas difíciles circunstancias", ha argumentado.

Un mando policial, Drew Harris, ha condenado igualmente la violencia y ha informado de varios agentes heridos. Durante los enfrentamientos fue lanzado un aparato pirotécnico contra los policías y solo la "rápida reacción" de los agentes impidió que hubiera heridos graves.

Harris ha explicado que los asistentes tenían "intenciones violentas" y ha recordado que no podía haber participantes porque manifestarse no está contemplado entre las excepciones para desplazamientos esenciales previstos en la normativa contra el coronavirus.