El juicio contra el expresidente francés Nicolas Sarkozy y otras 13 personas por la presunta financiación irregular de su campaña electoral de 2012 quedó aplazado este miércoles a petición de una de las defensas, al encontrarse sus dos abogados enfermos de covid-19.

La presidenta del tribunal aceptó la petición de retraso del juicio y fijó la nueva fecha de inicio del proceso para el próximo 20 de mayo, de forma que concluirá el 22 junio.

Sarkozy fue el único de los acusados que no acudió a la sesión de apertura al Palacio de Justicia de París, el mismo lugar donde hace dos semanas fue condenado a 3 años de cárcel, dos de ellos exentos de cumplimiento, por corrupción y tráfico de influencias.

Era la primera pena que privaba de libertad a un exinquilino del Elíseo, pero quedó en suspenso porque el hombre que dirigió Francia entre 2007 y 2012 recurrió la sentencia, por lo que será vista en apelación e los próximos meses.

En este caso, Sarkozy afronta de nuevo una pena de un año de cárcel y 3.750 euros de multa por haberse beneficiado de una doble contabilidad que permitió a su campaña de 2012 superar con creces los gastos permitidos por la ley.

El expresidente deberá demostrar que, como ha declarado en numerosas ocasiones, desconocía esa trama, sacada a la luz en una entrevista televisiva en 2014 por el número dos de su campaña, Jérôme Lavrilleux.