Autoridades mexicanas encontraron este martes los cuerpos de una mujer de 22 años y su hijo de 5, quienes fallecieron en un derrumbe del cerro del Chiquihuite, aledaño a la capital, ocurrido hace once días y que deja en total cuatro muertos. Las autoridades indicaron que los cuerpos corresponden a un niño y a una mujer, madre e hijo, cuyos cuerpo permanecían sepultados bajo los escombros.

El Gobierno del estado de México (centro), donde su ubica el cerro, detalló que el hallazgo se dio mediante el trabajo de equipos de búsqueda y rescate e indicó que los cuerpos fueron trasladados a la Fiscalía General de Justicia estatal para llevar el proceso legal de reconocimiento e identificación. Los dos cuerpos fueron encontrados 11 días después del derrumbe y con ello sumaron cuatro muertes en total por el alud. En la nota se informó que tras 260 horas de búsqueda, la noche de este martes, "elementos de búsqueda y rescate lograron el hallazgo y extracción de dos cuerpos de la zona donde se registró el desprendimiento de rocas en el Cerro del Chiquihuite", en el municipio de Tlalnepantla. Las autoridades señalaron que en los siguientes días continuarán los trabajos de estabilización en la zona de afectación al igual que las tareas para atender a los afectados.

El derrumbe se produjo el viernes 10 de septiembre cuando empezaron a desprenderse toneladas de tierra que dejaron sepultadas varias viviendas. El suceso dejó en ese momento una joven muerta y varios lesionados. Además, desde entonces eran buscados Paola Campos Robledo, de 22 años, y Mía Mayrin y Jorge Dilan Mendoza Campos, de 3 y 5 años, respectivamente. El hallazgo del cuerpo de la niña ocurrió el 14 de septiembre y el encuentro de los cuerpos de Paola Campos y Dylan Mendoza se dio este martes.

El deslave provocó conmoción nacional por ocurrir en una zona marginada que nació como asentamiento irregular. Los vecinos denunciaron que previamente habían alertado a las autoridades de posibles riesgos de derrumbe en la zona, que incluso aparece en los Atlas de Riesgo oficiales por su peligrosidad.