Al menos 16 personas han fallecido y 34 han resultado heridas por los enfrentamientos iniciados en la noche del jueves en la capital de Libia, Trípoli, y protagonizados por milicias enfrentadas en medio del repunte de las tensiones por la crisis política y el ahondamiento de la crisis económica.

El portavoz de Servicio de Emergencias y Ambulancias, Osama Ali, ha informado del aumento de víctimas en el balance actualizado de la noche de este viernes, según ha informado el medio 'Alwasat'. Las cifras aumentan en seis víctimas mortales y en nueve heridos, respecto de los últimos datos. Entre los fallecidos habría al menos seis civiles y un niño.

Los ataques involucran a dos grupos: la llamada Fuerza Especial de Disuasión de la RADA (FED-RADA), dirigida por Abdul Rauf Kara, antiguos combatientes contra Gadafi y ahora reconvertidos en fuerza parapolicial, que han lanzado un ataque a gran escala en lugares controlados por la Brigada Revolucionaria de Trípoli (BRT), dirigida por Ayub Abu Ras, afines al Gobierno de Unidad de la capital. Fuentes del portal 'Libya Observer' han indicado que los enfrentamientos comenzaron tras el secuestro de un alto comandante de la RADA por un grupo afiliado a la Brigada Revolucionaria, dos milicias que operan dentro del maremágnum de grupos armados que pululan por Trípoli prácticamente desde la caída de Gadafi en 2011.

Tras unas horas de calma, los combates volvieron a comenzar en la tarde del viernes en esta última zona. Personas que quedaron atrapadas en medio de los enfrentamientos buscaron refugio en salones de bodas y varios residentes han pedido un corredor seguro para escapar de los combates mientras los proyectiles caen de manera indiscriminada sobre las zonas residenciales.

Por su parte, el Consejo Presidencial ha publicado un comunicado en el que ha pedido a las partes que "pongan fin a los combates y vuelvan inmediatamente a sus posiciones", antes de reclamar a la Fiscalía que "abra una investigación exhaustiva sobre las causas de los enfrentamientos". "Los ministerios de Defensa e Interior del Gobierno de unidad nacional deben tomar las medidas necesarias para imponer la seguridad en la capital", ha indicado, apenas unos días después de que altos cargos militares de las administraciones enfrentadas celebraran un poco frecuente encuentro en Trípoli en el que pidieron proceder a la unificación de la cadena de mano para intentar avanzar hacia una solución de la crisis.

Las conversaciones en la vía militar son parte de un proceso de tres vías impulsado para intentar poner fin al conflicto en el país, ahondado tras el aplazamiento de las presidenciales previstas para diciembre de 2021. La Cámara de Representantes, con sede en el este, afirmó tras ello que el mandato del primer ministro de unidad, Abdul Hamid Dbeibé, había expirado y nombró a Fazi Bashaga como sustituto. El Gobierno de unidad ha rechazado la decisión de la Cámara de Representantes, que supone un varapalo para los esfuerzos para poner fin al conflicto, y ha mantenido que Dbeibé seguirá en el cargo para poner en marcha su nueva 'hoja de ruta', que contemplaba la celebración de legislativas en junio, precedidas por un referéndum constitucional que genere un marco legal para la celebración de los comicios, si bien no ha tenido lugar.

Dbeibé fue elegido como primer ministro por el Foro de Diálogo Político Libio (LPDF) en febrero de 2021, con lo que sustituyó al hasta entonces primer ministro de unidad, Fayez Serraj, quien aceptó ceder sus competencias tras el proceso de consultas, iniciado después de un acuerdo de alto el fuego después de que las autoridades de Trípoli rechazaran la ofensiva militar lanzada en abril de 2019 por el general Jalifa Haftar, alineado con las autoridades asentadas en el este.