Según la BBC

La pérdida de popularidad y las críticas internas llevan a Sturgeon a dimitir como ministra principal de Escocia

"No puedo dar a este trabajo cada gramo de energía que necesita", explica la política independentista

La ministra principal de Escocia, Nicola Sturgeon.

La ministra principal de Escocia, Nicola Sturgeon. / Reuters

Begoña Arce

Nicola Sturgeon, la gran abandera de la independencia de Escocia durante la última década, abandona el cargo como ministra principal. Su inesperada renuncia causó este miércoles una gran conmoción política en el Reino Unido. La líder del Partido Nacional Escoces (SNP) dio a conocer su decisión en una conferencia de prensa celebrada en St. Andrew's House, la sede del Gobierno escocés en Edimburgo. "Hoy anuncio mi intención de dimitir como ministra principal y líder de mi partido", afirmó. "Permaneceré en el cargo hasta que sea elegido mi sucesor". Sturgeon aludió como razón de su marcha al desgaste después de más de ocho años al frente del Gobierno autónomo. "No puedo dar a este trabajo cada gramo de energía que necesita". Lo más duro, afirmó, fue liderar Escocia durante la pandemia y "solo recientemente" se ha dado cuenta del "impacto físico y mental" que aquello le provocó. "En mi cabeza y en mi corazón sé que el momento es ahora. Es lo que debo hacer por mí, por mi partido y por mi país". La ministra principal permanecerá en el puesto hasta que el comité nacional ejecutivo del SNP elija a un nuevo líder, antes quizás de la conferencia extraordinaria que ya estaba prevista para el próximo mes.

Enormemente popular, con ella al frente el SNP ha ganado cuatro elecciones autonómicas consecutivas desde que sustituyera a Alex Salmond en noviembre de 2014 tras el fracaso del referéndum de independencia. Sin embargo, en los últimos meses esa popularidad se ha visto mermada por algunos pasos en falso. Sturgeon negó que su decisión se haya debido a "presiones recientes", una alusión a la controversia provocada hace unas semanas por la Ley Escocesa de Reconocimiento de Género, que simplificaba los trámites a las personas deseosas de cambiar su identidad de género y rebajaba a los 16 años la edad legal para ese cambio. Una gran parte de los escoceses, incluidos simpatizantes del SNP, no está de acuerdo con el cambio. La disputa se agudizó después de que un condenado por violación, Isla Bryson, que se declaró trans cuando ya había sido acusado, fuera encarcelado en una prisión de mujeres. El plan de Sturgeon se topó después con la barrera del Gobierno de Rishi Sunak, dispuesto a utilizar su prerrogativa para impedir la ley.

Divisiones internas

Otro factor que ha influido en la renuncia es la división dentro del SNP con respecto a su intención de transformar las próximas elecciones generales en un referéndum de facto sobre la independencia de Escocia. Esa estrategia se revisará en el encuentro de marzo. "En conciencia no puedo pedir al partido que elija una opción basada en mi juicio, sin estar convencida de estar ahí como líder para sacarla adelante. Quiero dejar claro que el SNP es ahora libre de elegir el camino que considere adecuado", declaró Sturgeon. De acuerdo con un sondeo publicado esta semana, la mitad de los votantes del SNP consideran que su plan no tenía credibilidad. La ministra principal no ha podido encontrar una vía legal para celebrar un segundo referéndum. En noviembre, el Tribunal Supremo del Reino Unido decidió que el Parlamento escocés no tiene poder para convocar esa segunda consulta, que Sturgeon había planeado llevar a cabo este otoño.

Polarización y reconocimiento

La figura política más exitosa de Escocia es también la más controvertida y divisoria. La propia Sturgeon dio a entender al anunciar su retirada que se había convertido en parte del problema a la hora de lograr el apoyo necesario en favor de la independencia. "Cuando más tiempo un líder permanece en el cargo más difícil es cambiar la visión que la gente tiene de él", declaró. "Un nuevo líder quizás sea más capaz y estar menos sujeto a la polarización de la opinión (pública)".

Eficiente comunicadora, durante la pandemia su estilo mesurado y cauto frente al desmedido y rimbombante de Boris Johnson le valió la aprobación general. Este miércoles su talla era reconocida por simpatizantes y adversarios. Sunak, le agradeció "su prolongado servicio" y le deseó "lo mejor en sus próximos pasos". La ex primera ministra Theresa May señaló que si bien no está de acuerdo con la escocesa "en muchos aspectos" le agradecía "su largo e incansable servicio" por el país y "por la relación profesional" que mantuvieron como líderes. El 'premier' de la República de Irlanda, Leo Varadkar, alabó a la que considera "una verdadera europea".