Un total de 138 empresas, 2.470 trabajadores y una superficie bruta de 46 hectáreas. Son algunas de las cifras que permiten hacerse una idea acerca de la magnitud del gigante que se asienta en Llanera: es el Parque Tecnológico de Asturias, situado a poca distancia de la capital del concejo, y diseñado hace ya varias décadas como espacio para atraer talento y negocio que generasen desarrollo económico basado en la innovación, la tecnología y el conocimiento. Inaugurado en 1991, no solo es la sede de los principales organismos regionales de promoción empresarial (Grupo IDEPA), sino que tras más de treinta años de funcionamiento, concentra a un importantísimo número de compañías entre las que sobresalen las relacionadas con las tecnologías de la información y la comunicación (TIC), la ingeniería y la consultoría técnica y medio ambiental, el sector eléctrico, el de las energías renovables, el químico-farmacéutico y el biotecnológico.

Por sectores de actividad, de las 138 empresas ubicadas en el parque es el de las TIC el más numeroso: cuenta 42 compañías (el 31 por ciento del total) que generan 662 empleos (el 24 por ciento de los existentes en este espacio). Le sigue el de la Ingeniería industrial, civil y arquitectura, que, con 22 empresas, representa al 16 por ciento de todas las presentes en este espacio. El empleo en este ámbito suma 275 puestos, un 11 por ciento del total.

Las dedicadas a los ámbitos “Químico, bio y salud” suman 17 empresas (un 12 por ciento del total de empresas existentes en el parque), aunque el porcentaje de empleo que representan es menor que en otros casos (144 puestos, un 6 por ciento del total). Energía y medioambiente, con 16 compañías presentes, representa similar porcentaje en cuanto a cantidad de empresas, si bien concentra un gran número de empleos (en ellas trabajan 356 personas, el 14 por ciento del total del que genera el parque).

Otro de los sectores con mayor creación de empleo es el de la gestión empresarial y los recursos humanos (con 11 empresas, un 8 por ciento del total, genera 306 puestos, un 14 por ciento del conjunto del parque). Con el mismo porcentaje en cuanto a número de compañías del sector se encuentra el que engloba la presencia de organismos, asociaciones y servicios: son 11 entidades en las que trabajan 137 personas, un seis por ciento del total de empleados que concentra este enorme complejo.

Curiosamente es uno de los ámbitos en el que el número de empresas es más bajo el que se sitúa como uno de los mayores polos de creación de empleo. Se trata del de la electrónica y la electricidad, que suma nada menos que 413 puestos de trabajo (un 17 por ciento del total) a partir de la presencia de 10 compañías del ramo, que suponen sin embargo tan solo un 7 por ciento del total de las establecidas en el Parque Tecnológico.

El resto de los 177 empleos hasta completar los 2.470 que genera el parque corresponde a otros tipos de empresas cuya finalidad no se precisa, por ser diversa, en la estadística acerca de los sectores de actividad presentes en el parque.

¿Cómo se organiza y funciona el complejo?

Y, más allá de las cifras, ¿cómo se organiza el Parque Tecnológico? Sus objetivos oficiales son "fomentar la creación de empresas de futuro, impulsar la evolución tecnológica, favorecer la creación de empleo cualificado, constituir un punto de encuentro entre empresas, centros tecnológicos y la Universidad, generar sinergias fomentando las relaciones personales y el networking entre las empresas instaladas y proyectar una imagen atractiva e innovadora que beneficie a las empresas instaladas y contribuya a la captación de inversiones".

Vista de una de las áreas del gran complejo. IDEPA

Sus responsables definen al Parque Tecnológico como un “verdadero ecosistema” que acoge una comunidad empresarial compuesta por distintos actores. Por un lado, el parque es la sede del sistema de promoción económica del Principado, incluyendo al Instituto de Desarrollo Económico del Principado (IDEPA), la Sociedad Regional de Promoción (SRP), la Sociedad de Garantía Recíproca de Asturias (ASTURGAR), la Sociedad de Promoción Exterior Principado de Asturias (ASTUREX) y el Centro Europeo de Empresas e Innovación del Principado de Asturias (CEEI-Asturias)

El CEEI es la llamada incubadora del parque, esto es, el centro que desarrolla todas las actividades dirigidas al apoyo a emprendedores y Empresas Innovadoras de Base Tecnológica (EIBT) incluyendo programas de dinamización. En el Parque tecnológico existe asimismo la llamada Entidad de Conservación, formada por los propietarios de parcelas, que se encarga tanto de la conservación y mantenimiento de la urbanización (viales y zonas verdes), como de la prestación de servicios colectivos.

Sintetizando, el parque está adscrito al IDEPA, el CEEI-Asturias gestiona su incubadora, y la Entidad de Conservación se encarga de los servicios comunes del conjunto del espacio.

Y, a partir de este esbozo, está el protagonismo de las empresas. En el gigantesco recinto hay tanto multinacionales (Axalta, Phoenix Contact, Ricoh, Exac…), “fruto en muchos casos de la política de atracción de inversiones del Principado”, como start ups, cuyo ejemplo más claro es Metrohm Dropsens, spin off de la Universidad de Oviedo que, tras crecer con el apoyo de la bioincubadora del CEEI, fue adquirida por la multinacional Metrohm y ha comprado recientemente una parcela en el parque sobre la que proyecta su propio edificio.

¿Qué infraestructuras o servicios existen al servicio de la I+D+i?

El parque cuenta con diversas infraestructuras que crean un entorno favorable para la investigación, el desarrollo y la innovación (I+D+i). Entre otras, las siguientes:

-Centro tecnológico Idonial, especializado en el área de materiales no metálicos, con varias líneas de trabajo en economía circular, formulación de materiales refractarios, materiales cerámicos para fabricación aditiva, valorización de residuos de construcción y de cenizas de térmicas o depuración ecoeficiente.

-La bioincubadora del CEEI, que cuenta con un total de 1.264 metros cuadrados de superficie, ofrece 6 laboratorios llave en mano en régimen de alquiler de entre 55 y 90 metros completamente equipados y que incluyen una zona de despacho y 5 oficinas nido para la pre-incubación de proyectos empresariales. Dispone de una sala de instrumental común equipada con PCR Cuantitativa, Microscopio de Fluorescencia, circuito de agua de calidad pura (Tipo II) y ultrapura (Tipo I), sistema de documentación de geles, autoclave, estufas, ultracongelador, entre otros. Esta bioincubadora, que ha sido utilizada por Metrohm Dropsens en sus inicios, acoge actualmente spin off de la Universidad de Oviedo como Nanovex Biotechnologies (que produce nanopartículas metálicas y nanovesículas para múltiples aplicaciones) o Bioquochem (que desarrolla kits y dispositivos para medida de parámetros REDOX en el campo de la salud y de la alimentación).

Vista de otro de los sectores del Parque Tecnológico IDEPA

-Servicios de apoyo prestados desde IDEPA para la difusión y gestión de diversas líneas de subvención a proyectos de I+D+i. Realizada de forma habitual por el IDEPA, se suman dos servicios especializados en esta materia: el Centro de Información de Patentes (Red PATLIB): Asociado a la Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPM), que proporciona servicios de información, asesoramiento, difusión y registro con el objetivo de facilitar la gestión de la propiedad industrial; el Punto de Información sobre actividades de Investigación, Desarrollo e innovación (Red PI+D+i), que da información y asesoramiento técnico personalizado a empresas y emprendedores acerca de los diferentes programas de apoyo a la I+D+i, resolviendo sus dudas sea cual sea el tamaño de la entidad y difunde las ayudas existentes en materia de I+D+i a través de jornadas y seminarios.

¿Cómo se relaciona con la Universidad?

Además de las relaciones derivadas de la actividad de los centros tecnológicos y de las colaboraciones continuadas que mantienen individualmente distintas empresas del Parque Tecnológico, hay establecidos otros cauces institucionales. El IDEPA representa al parque como miembro de la Sociedad de Partners de la Escuela Politécnica de Ingeniería, participando regularmente en sus actividades. Desde el CEEI se colabora de forma estrecha con la Universidad favoreciendo el emprendimiento, actividad que se visibiliza en programas como el premio RADAR.

También destaca el Centro tecnológico privado Normagrup Technology, que ha supuesto una inversión cercana a los 3 millones de euros y que por su equipamiento aspira a ser referente europeo. Cuenta en total con una superficie de 6.000 metros cuadrados, de los que más de la mitad están destinados a laboratorios, departamento de I+D+i y teoría de iluminación aplicada. En él se analizan los efectos perjudiciales derivados de una iluminación incorrecta y se desarrollan nuevas tecnologías para contribuir a paliarlos, actuando a su vez como centro de formación en teoría de la luz. Las empresas del Parque Tecnológico Asturias participan de forma sostenida en proyectos de I+D+i. Por ejemplo, la mencionada Normagrup ha desarrollado en colaboración con la Universidad de Oviedo un sistema basado en radiación ultravioleta que desinfecta en 15 minutos zonas de uso común y fue instalado en un hotel avilesino, además de participar junto con Idonial y Arcelor en el Proyecto Reservist, para implementar una línea durmiente capaz de producir diferentes dispositivos contra la covid, entre ellos respiradores, explican desde el IDEPA.