El Gobierno regional tiene previsto contratar el mes que viene una asesoría técnica para preparar la declaración del yacimiento romano de Lucus Asturum, en Lugo de Llanera, como Bien de Interés Cultural (BIC). Además, en los presupuestos autonómicos de 2023 se incluirá una partida específica para sufragar una nueva campaña de excavaciones y otras actuaciones en este valioso enclave. En unas recientes declaraciones a LA NUEVA ESPAÑA, el alcalde de Llanera, el socialista Gerardo Sanz, reclamaba al Principado una "mayor implicación" con Lucus Asturum, algo que parece que se va a hacer realidad.

Sanz también aboga por ir pensando en abrir el yacimiento al público, de forma que el concejo de Llanera pueda beneficiarse de lo que todo parece indicar que va a ser un aliciente turístico de primer orden para el centro de Asturias. "Ahora mismo, el yacimiento se está abriendo y cerrando tras cada campaña de excavaciones, pero sería interesante empezar a pensar en no cerrarlo, en mostrarlo al público y acometer actuaciones más globales", señala el regidor, muy satisfecho con el trabajo que ha levado a cabo este verano en Lucus Asturum el equipo que dirige la arqueóloga Esperanza Martín, que también se ha encargado recientemente de las excavaciones en el campamento romano y las empalizadas astures que sacaron a la luz hace más de una década Jorge Camino, Yolanda Viniegra y Rogelio Estrada en La Carisa (Lena).

La campaña de este año en Lugo de Llanera ha puesto de manifiesto que Lucus Asturum es un yacimiento arqueológico de primer orden. Además, los trabajos de los arqueólogos han permitido comprobar que este enclave supuso un punto central de las de las comunicaciones y el comercio en el norte de la Península, gracias a su posición privilegiada al paso de la vía Carisa desde León Gijón. Otra de las cuestiones que ya dan demostrado los investigadores es que Lucus Asturum tuvo presencia romana estable durante cuatro siglos, como prueban las más de dos mil piezas que han sido localizadas por el equipo que lidera Esperanza Martín.

Lucus Asturum ha dado muchas sorpresas a los arqueólogos, que consideran fundamental seguir adelante con las excavaciones en busca de más información de interés para desentrañar el pasado romano de Asturias.

Durante décadas, la ubicación exacta de Lucus Asturum, un enclave citado por el geógrafo Ptolomeo en el siglo II, fue uno de los grandes enigmas de la arqueología asturiana. Unas fotografías aéreas tomadas en la zona de La Morgal en 2014 indicaron puntos idóneos para encontrar los restos de este singular emplazamiento romano. Aquellos resultados llevaron al Ayuntamiento a impulsar una excavación. En 2018, arqueólogos y voluntarios con Martín a la cabeza afrontaron la primera campaña. Desde entonces, ha habido ejercicios para la excavación y otros para el trabajo en el laboratorio, que también tiene una relevancia vital para la excavación.