¿Cómo es la polilla?

La tecia o polilla guatemalteca de la patata es un organismo de cuarentena procedente de Centroamérica que entró en España por Canarias en 1999. En 2015 se detectó por primera vez en la Península y ahora está localizada en varios concejos de Galicia y Asturias. En esencia, es un lepidóptero de entre 10 y 15 milímetros que se alimenta exclusivamente de patata.

¿En qué estado está la plaga?

San Tirso de Abres, Vegadeo y Castropol son los tres concejos con polilla contrastada, aunque la afección del lepidóptero no es igual en todas las zonas de estos concejos. La red de trampas instalada por el Principado ha permitido además localizar su presencia esporádica en Taramundi, Navia, Valdés y Cudillero. No se descarta que pueda localizarse el insecto en otros concejos.

¿Cómo se propaga?

El traslado de patata afectada a zonas sin afección es el principal factor de propagación. Una vez en un territorio, la polilla puede atacar tanto a la plantación de patata como al tubérculo almacenado.

¿Podré plantar si estoy en un concejo afectado?

A día de hoy, no hay ninguna medida en vigor que lo prohíba, pero el Ministerio de Agricultura ultima un real decreto que estará listo en un par de meses y establecerá prohibiciones en la zona afectada. Este documento estatal determinará si la prohibición afecta al concejo entero o sólo a algunas zonas.

¿Puedo enviar patatas de la zona afectada a un familiar que vive fuera?

En octubre del año pasado el Principado ya estableció la prohibición de sacar patata de los concejos de San Tirso de Abres, Vegadeo y Castropol, los más afectados por la plaga. El real decreto que prepara el Gobierno central también determinará prohibiciones en este sentido para controlar la plaga.

¿Qué precauciones debo de tener en el almacenaje?

La particularidad de esta plaga es que no sólo afecta al cultivo, sino también a la patata almacenada. En aquellos lugares con polilla localizada es importante extremar las precauciones con medidas como limpiar bien el almacén, colocar mallas tupidas en ventanas o huecos, revisar periódicamente las patatas o elegir espacios con temperaturas bajas. También se recomienda la instalación de trampas con feromonas para la rápida detección del lepidóptero. En todo caso, los expertos indican que en esta situación es recomendable renunciar a la compra masiva de patatas para almacenar durante toda la campaña y es preferible apostar por compras pequeñas y periódicas para poder controlar mejor el tubérculo.

¿Tiene algún peligro para las personas?

No hay ningún riesgo para la salud de las personas y, por tanto, la gente puede estar tranquila. El problema es que la polilla arrasa por completo con el tubérculo y lo convierte en inservible para el consumo.