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Javier Rodríguez llena Marvel de color

El ovetense que fuera guitarrista del grupo del Xixón Sound "Kactus Jack", residente en Barcelona desde hace casi quince años, dibuja tebeos de los superhéroes Daredevil y Spiderwoman

Javier Rodríguez llena Marvel de color

El dibujante Javier Rodríguez (Oviedo, 1972) lleva trabajando para la editorial Marvel desde 2008. Las librerías españolas tienen sus últimos números de "Daredevil" y las estadounidenses verán en seguida la nueva etapa de "Spiderwoman". El guión de Dennis Hopeless, un treintañero buen desarrollador de personajes, sitúa a la superheroína embarazada.

Javier Rodríguez marchó hace catorce años y medio a vivir a Barcelona porque le gustaba la ciudad y ahí ha asentado su vida. A sus amigos asturianos de su generación les sigue sonando este artista de los tiempos en que fue guitarrista de "Kactus Jack", un grupo del Xixon Sound al que puso todo el diseño.

Javier Rodríguez, con sus dos pies inquietos y sus dos manos diestras, ha llegado a sitios inesperados cuando publicaba sus primeras historietas en "Froilán", junto a Germán García, que fue el primer asturiano en Marvel ("X-Men"); Marco Recuero, autor del grafismo del Festival de Cine de Gijón; Arturo Fernández y Fran Pérez, todos ellos componentes de "El grupo enmascarado" y alumnos de la Escuela de Artes de Oviedo. Muy poco después, con la experiencia conseguida, fundó Cactus Cómics y se unió a dos músicos que también eran historietistas: Ígor Medio y Ruma Barbero, los dos fundadores de "Felpeyu", los dos recién titulados en Arte en Salamanca. Ígor (ya fallecido) alcanzó mucha fama en LA NUEVA ESPAÑA con "La familia Castañón" y Ruma es el autor de "Manzajú" y "Aguantando cachones".

Los colores llevaron a Javi Rodríguez a los tebeos estadounidenses. Cuando se asentó en Barcelona, ya tenía una carrera dentro de los comics-books independientes españoles a través de "Love Gun" y trabajaba en el mercado nacional como ilustrador en el suplemento "Tentaciones" del diario madrileño "El País" y como historietista en la revista "El Víbora".

La editorial Glenat le publicó en 2002 el álbum "Wake Up", una historia que sorprendió por la alegría de sus colores. Su amigo Marcos Martín le preguntó: "¿No te apetece colorearme lo que estoy haciendo". Y le apeteció. Lo que estaba haciendo era "Batgirl año 1" para la estadounidense DC (la editora de Batman y Superman). "Entonces ya había dejado de leer superhéroes".

En las grandes editoriales americanas el sistema de trabajo separa al dibujante a lápiz (la figura principal), al que se asigna un entintador y un colorista. El dibujo de Marcos Martín, la tinta de Álvaro López y el color de Javi Rodríguez lograron que la serie, escrita por Scott Beatty y Chuck Dixon, fuera un éxito.

"Mi trabajo llamó la atención porque hice una cosa muy loca, con noches de color rosa. Ahora ya no meto colores tan arriesgados. Funciono por tono o por colores, trabajando con el círculo cromático y si pongo un fondo frío a la viñeta, el frontal será cálido. Con el color cuido mucho que la vista del lector vaya donde yo quiero".

En los últimos años, el colorista ha ganado mucha presencia en los tebeos estadounidenses porque ya no se aplican los colores planos y porque los ordenadores facilitan muchos efectos que consiguen un terminado con volúmenes y brillos.

No pensó que su futuro fuera a estar en la industria estadounidense. En 2003 publicaba en "Mister K", la revista infantil de "El Jueves" y enfocaba sus pasos hacia Francia con "Lolita HR", una historieta de ciencia ficción trabajada en el estilo manga con guiones de Delphine Rieu para la editorial Humaoïdes Associés. La editorial suspendió pagos, el trabajo quedó en manos del juez. No pudieron retomarla hasta 2007 y la terminó Natacha Bustos.

También por entonces hizo la novela gráfica "Miedo", una historia de acoso escolar coincidente con el intento de golpe de Estado de Tejero, con guión de David Muñoz y Antonio Trashorras, dos escritores de historieta que acababan de escribir con Guillermo del Toro "El espinazo del diablo".

Hasta 2006 fue colorista para diversos superhéroes DC y para su línea adulta Vértigo y desde ahí fue captado por Marvel, muchas veces en compañía de autores españoles.

"Marcos Martín es un amigo y Javier Pulido también. El mundo del cómic es muy solidario, la gente se ayuda mucho, aprendemos unos de otros y nos avisamos de las noticias que hay si surge un trabajo".

Hace siete años que Javier Rodríguez trabaja para Marvel y su obra ya ocupa un buen espacio en la base de datos de la editorial. Como colorista trabajó muchísimo con un mito del dibujo: el veterano británico Alan Davis: "Nunca le conocí en persona pero tuvimos un trato muy continuo por correo electrónico durante dos años. Yo era muy fan de su trabajo y él es un perfeccionista que me escribió mil folios con detalles siempre explicados de cómo quería el trabajo. Me regaló cuatro páginas originales suyas".

Dar el color a las páginas de "Spiderman" dibujadas por Marcos Martín, Paolo Rivera, Javier Pulido o Ty Templeton le puso en contacto con Steve Wacker, el editor del personaje, en cuya línea cae también "Daredevil". Wacker le dio la oportunidad de colorear y de dibujar algunos de los números de la serie para la que empezó a trabajar en 2013.

Daredevil, que se ha vuelto uno de los personajes más interesantes de Marvel desde que hace más de 35 años fue renovado por un novato que se llamaba Frank Miller. En este tiempo ha sido un laboratorio de experimentos artísticos que ha dado interesantes resultados. La fase en la que Javier Rodríguez se hace con el color y a veces con los lápices es ligera, legible y visual y narrativamente muy atractiva. El estilo está marcado por el dibujante Paolo Rivera, al que acomodaron Marcos Martín y Chris Samnee.

Javi Rodríguez dejó la música a finales de los noventa, la década del Xixon Sound. Con su grupo "Kactus Jack" compartió EP con "Australian Blonde" en 1992 e hizo una carrera con tres discos con los sellos Subterfuge, Waco Records y Astro Records. Ahora sólo toca alguna vez por afición.

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