Este es el rincón preferido del Principado de 100 destacados asturianos

De todos los citados –que son muchos–, se ha sacado la lista de los 20 más votados –la votación ha sido muy, pero que muy ajustada–, y es el recóndito Bandujo el que encabeza el ranking. Los motivos por los que ha ganado este bucólico enclave de origen medieval, rodeado de montes de pinos y carbayos, asentado entre pendientes laderas por las que no es difícil ver osos y, pese a todo, queda a poco más de media hora en coche de Oviedo, son variopintos: la importancia de su patrimonio, su singular trazado, la belleza paisajística que lo rodea y la sensación de viajar al pasado mientras se pasea entre sus casas, muchas nobles.

A Bandujo le siguen Lastres (Colunga), Bulnes (Cabrales) y la villa de Cudillero, empatados a votos. Al igual que el quinto y el sexto: Tazones (Villaviciosa) y Puerto de Vega (Navia). La lista la completan: Viavélez (El Franco), Sotres (Cabrales), Castropol (Castropol), San Emiliano (Allande), Llanes (Llanes), Riodeporcos (Ibias), Argul (Pesoz), Ribadesella (Ribadesella), Taramundi (Taramundi), Besullo (Cangas del Narcea), Espinaréu (Piloña), Somao (Pravia), San Esteban de Pravia (Muros) y Santa Eulalia (Santa Eulalia de Oscos).

La lista sigue y son muchos más los que han recibido votos y han sido elegidos por los encuestados. Todos ellos merecen una visita porque todos tienen su singularidad e importancia.

La lista del top 20 de los más votados está repartida por toda Asturias de Oriente a Occidente y resume perfectamente la esencia del Paraíso Natural: mar y montaña, arquitectura y paisaje, arte y naturaleza. Con Bandujo, el primero del ranking, LA NUEVA ESPAÑA inicia la serie llamada “De guapo subido”, que se prolongará a lo largo de todo el verano y tendrá su espacio en el suplemento estival a partir del 1 de julio.

Pueblos y aldeas en los que se ha detenido el tiempo. Villas en las que acercarse a las tradiciones más arraigadas. Enclaves todos ellos en los que disfrutar de paisajes naturales que quitan el hipo, de arquitectura de hace siglos perfectamente conservada, de una gastronomía de indudable calidad y de gentes dispuestas a abrir sus casas de par en par y acoger al visitante sin más interés que el de hacerle sentir bien. La belleza y riqueza del paisaje y paisanaje de Asturias son inmensas. Merece la pena acercarse a sus rincones y conocerlos bien. Para ello hay todo un verano por delante, una estación que invita a viajar y a perderse con la familia, con los amigos, y también en soledad, para descubrir nuevos rincones. La serie “De guapo subido” va a ayudar a sus lectores a ello.

Con información de Tania Cascudo, Demelsa Álvarez, Ana M. Serrano, Sara Arias, Pablo Palomo, Lucas Blanco, Ramón Díaz, Julio Vivas, Illán García e Inés Montes.