La conducción en invierno, y sobre todo con la carretera cubierta de nieve, requiere unas actuaciones especiales al volante. En estas ocasiones, la suavidad y la ausencia de brusquedades son siempre imprescindibles. Volante, acelerador y freno son tres elementos a los que conviene mimar.
En las carreteras con nieve se aconseja circular en marchas largas, con una presión suave sobre el acelerador para evitar que las ruedas patinen. En caso de ser necesaria una frenada de emergencia se debe pisar con suavidad el pedal del freno. Hay que saber que con el sistema ABS las frenadas se alargan, pero a cambio no se bloquean las ruedas, contando con dirección para evitar las salidas de la carretera.
1. Si no tiene que conducir, deje la nieve sobre el coche.
La capa de nieve es el mejor aislante y evita temperaturas inferiores.
2. Si tiene que conducir, saque toda la nieve acumulada.
También del techo, para que cualquier resto de nieve pueda impedirle la visibilidad más tarde.
3. Evite viajar de madrugada o a primera hora de la mañana.
4. Reduzca la velocidad y respete la distancia de seguridad.
Para conducir con nieve o hielo es importante la capacidad de reacción, y esta disminuye a altas velocidades. Se aconseja triplicar esta distancia para evitar accidentes.
5. Preste especial atención a los puentes, el aire frío que pasa por abajo puede haber favorecido la formación de placas de hielo.
Atención, por la misma razón, en zonas de sombra o cerca de los ríos.
6. Circule dentro de las roderas hechas en la nieve por los coches que hayan pasado antes.
Evite salir, ya que tendrá un riesgo superior de perder el control de su vehículo.
7. En bajada, reduzca a una marcha más corta antes de lo que es habitual.
El motor actuará como freno del vehículo y reducirá considerablemente la velocidad sin necesidad de tocar el freno, una maniobra peligrosa cuando la nieve y el hielo están sobre el asfalto.
8. Subiendo pendientes, aumente ligeramente la velocidad.
También pase a una marcha intermedia para no tener que cambiar a media subida.
9. Si entra en una zona de hielo, reduzca la velocidad.
Evite hacer giros bruscos de volante.
10. Si su vehículo queda atascado, muévelo adelante y atrás.
Utilice la marcha atrás y la segunda marcha, hasta que pueda sacarlo.
