La niebla es uno de los fenómenos más frecuentes durante el invierno y, sobre todo, en los puertos de montaña y en las localidades situadas a una altura considerable respecto al nivel del mar.

Tal y como explican desde la Dirección General de Tráfico (DGT) "cuando la niebla aparece se reduce su visibilidad y el riesgo aumenta. Ante estas situaciones, siga estas reglas básicas:

  • - Las luces antiniebla delanteras y el piloto antiniebla trasero le ayudarán a ver algo mejor y ser visto.
  • - Reduzca su velocidad, adecuándola a las circunstancias, para que sea posible detenerse dentro de su campo de visión.
  • - Aumente la separación frontal para evitar alcances: a 50 km/h y con suelo mojado, un turismo no se detiene antes de 30 metros.
  • - Si la niebla es muy cerrada, no se empeñe en imposibles: abandone la vía y espere a que despeje.
  • - En vías de dos sentidos, lo más recomendable es evitar los adelantamientos.
  • - En autovías o autopistas con circulación densa, mantener una distancia de seguridad mayor porque nunca sabemos qué va a hacer el vehículo que nos precede.

Por lo tanto, a muchos conductores les entra la gran duda, ¿Cómo se utilizan correctamente las luces antiniebla?:

Luces antiniebla delanteras:

• Se utiliza en condiciones que disminuyan sensiblemente la visibilidad, aislada o junto a las de corto y largo alcance.

• No es obligatoria y no la equipan todos los vehículos.

• También puede utilizarlas de noche en carreteras estrechas (menos de 6,5 m. de ancho) con curvas sucesivas señalizadas.

• Mal utilizada, deslumbra de frente y reflejada en los retrovisores.

 Luces antiniebla traseras:

• Luz roja intensa, para hacer más visible el vehículo por detrás.

• Una, a la izquierda o en el centro; o dos, en los bordes exteriores.

• Obligatoria para automóviles (excepto motocicletas), solo en condiciones desfavorables: con niebla espesa, lluvia muy intensa o fuerte nevada.

• Apáguela en retenciones o si la niebla desaparece para no deslumbrar a los conductores que van detrás.

El mal uso de estos faros puede conllevar una multa por parte de los agentes de tráfico. Si un vehículo utiliza estas luces cuando las condiciones climatológicas no son desfavorables puede recibir una sanción de hasta 200 euros sin retirada de puños.