Gasolina y diésel encadenan diez semanas consecutivas de subidas y vuelven a marcar máximos históricos de venta al público. ¿Es posible ahorrar en combustible? La respuesta es sí. Pese a que los precios se han disparado al calor de la guerra de Ucrania, la elección de gasolinera resulta de vital importancia porque hay hasta 30 euros de diferencia a la hora de llenar el tanque en los diferentes estaciones asturianas.

Los pequeños transportistas le echan un pulso a la Moncloa con el objetivo de conseguir mejores condiciones de trabajo para el sector. El paro patronal indefinido convocado por la Plataforma en Defensa del Transporte de Mercancías por Carretera ha tenido un impacto desigual en España durante su primera jornada.

El castigo al consumidor es evidente. Llenar el depósito de un vehículo con una media de 55 litros de gasolina cuesta alrededor de 100 euros, lo que supone desembolsar 21 euros más que hace un año, casi un 30% más. En el caso del gasóleo, repostar y llenar el tanque implica un coste que roza los 87 euros, 22 euros más que en la misma semana del año pasado y con una subida de casi el 35%.

El precio del carburante ronda entre el 1,8 y 1,9 euros el litro para repostar. Una cifra que encarece el poder llenar nuestro vehículo. La pregunta que se hacen muchos es, ¿cuándo es más barato echar gasolina? Según los expertos, el mejor día para repostar es el lunes. Por el contario, el día más caro es el sábado.

Patronales del transporte y de gasolineras piden un rebaja fiscal carburantes

La Asociación del Transporte Internacional por Carretera (Astic) y la Confederación Española de Empresarios de Estaciones de Servicio (CEEES) han pedido hoy al Gobierno que rebaje la presión que soportan los carburantes.

En una nota conjunta piden, de forma temporal y extraordinaria, "medidas excepcionales" como la reducción del IVA, la exención del Impuesto Especial de Hidrocarburos o la devolución mensual del gasóleo profesional.

Con estas medida aseguran que se mitigaría la "dificilísima situación" que atraviesa la economía española y, en particular, los sectores del transporte y de las estaciones de servicio después de que el barril de crudo haya atravesado la barrera de los 100 dólares por barril.

Las patronales recuerdan que las medidas que proponen ya se están llevando a cabo en otros estados miembros de la Unión Europea, entre los que citan Portugal, Irlanda, Polonia, Eslovenia o Francia (a partir de 1 de abril el ejecutivo galo rebajará 15 céntimos por litro en el combustible).

En su opinión, serían un "balón de oxígeno" para las empresas españolas, que asisten "impotentes" a una escalada de los precios de los carburantes que "mina su competitividad y provoca un estrangulamiento financiero del tejido productivo"