España entera llora la pérdida de Julen frente al televisor. En las cafeterías de Valencia se sigueb los acontecimientos a través de Telecinco. La gente lo vive con tremenda solidaridad. La noche ha sido larga. Muchos no han podido ni dormir. En los bares a la hora del desayuno y del aperitivo no se habla de otra cosa. Hoy no es un día como otro cualquiera. Trece días de desgarro para un país que ha seguido minuto a minuto la situación de Julen