Langreo, M. Á. G.

Un langreano de 31 años de edad ha sido condenado a tres años de prisión por agredir sexualmente a una operaria de la limpieza en Sama, el pasado mes de marzo. El hombre apenas llevaba cuatro meses en libertad, después de cumplir una pena de 10 años por otra agresión sexual. El fallo del Juzgado de lo penal número 1 de Langreo, que recoge la agravante por reincidencia, también condena al agresor a indemnizar a su víctima con 3.000 euros, por los daños morales ocasionados. La sentencia es firme al haberse dictado de conformidad con fiscalía, acusación particular y abogado de la defensa.

Según figura en la sentencia, los hechos tuvieron lugar sobre las 2.45 de la mañana del pasado 14 de marzo, en la confluencia de la calle La Unión y el paseo de Los Llerones, en Sama. El agresor abordó a su víctima por la espalda, cuando la mujer, operaria municipal, desarrollaba tareas de limpieza en la zona. Tras exhibir una navaja y amenazar con matarla si no guardaba silencio, condujo a la mujer a la parte trasera de una caseta de aguas, donde la arrojó con fuerza al suelo.

En ese momento, el agresor desabrochó los botones de la camisa de la víctima y le realizó diversos tocamientos, al tiempo que le decía «abrázame que estoy falto de cariño, déjame darte un besu». Posteriormente, la mujer le dijo a su agresor que la dejase tranquila para poder irse porque, de lo contrario, tendría que matarla.

Ana María González, abogada de la operaria y letrada del Centro de Ayuda a Víctimas de Agresiones Sexuales y Malos Tratos (Cavasym), explicó que la identificación del agresor se produjo por fotografías, en una rueda de reconocimiento y por un registro de voz. Al hombre también se le encontraron las ropas descritas por la víctima. «Llevaba en libertad desde octubre o noviembre de 2008, tras cumplir otra pena por agresión sexual», indicó. Esa condena anterior fue dictada en diciembre de 1999 por la Audiencia Provincial de Oviedo, por un período de diez años.

Agresión

La agresión tuvo lugar en Sama, el pasado mes de febrero, cuando el condenado abordó a la víctima, operaria de la limpieza, de madrugada. Tras amenazarla con una navaja, la arrojó al suelo y le realizó diversos tocamientos, antes de permitir que se fuera.

Antecedentes

El agresor, de 31 años, llevaba apenas unos meses en libertad, tras cumplir una condena de diez años por otra agresión sexual. Ahora deberá hacer frente a una pena de tres años y al pago de 3.000 euros.