Langreo, L. M. D.

Las obras de desdoblamiento de la carretera de los túneles de Riaño (AS-17) llevan en marcha desde el pasado mes de febrero, pero hasta el momento apenas se habían dejado notar y el tráfico circulaba con total normalidad. A partir de este miércoles, las cosas cambiarán. La Dirección General de Carreteras anunció ayer que desde el 22 de julio se hará necesario regular el tráfico en el tramo. Entre otras medidas, la velocidad máxima de circulación se reducirá a 40 kilómetros por hora; se eliminará el carril de vehículos lentos en la vertiente langreana de la vía; se acortará el mismo carril en la zona sierense, y se habilitarán dos glorietas provisionales en las cercanías de la entrada a los actuales túneles. La regulación del tráfico planteada por Carreteras se prolongará, al menos, los próximos catorce meses.

Estas restricciones servirán para acometer la construcción de dos de las nuevas estructuras de la futura autovía: el túnel sur del Cadaval, que tendrá una longitud de 1.179 metros, y un viaducto de 404,5 metros que salvará la Autovía Minera y la vaguada que forma el reguero El Cayu. Según explicó la Consejería de Infraestructuras, para «garantizar la seguridad del tráfico y hacer coexistir la circulación normal con la de vehículos de obra», se reducirá la velocidad permitida en el tramo hasta los 40 kilómetros por hora (actualmente hay zonas limitadas a 80 y a 60). Además, se eliminará el carril de vehículos lentos entre Riaño y los túneles, y se adelantará 500 metros el final del carril de tráfico lento en sentido Siero-Langreo.

Las dos rotondas provisionales, una en la entrada de los túneles en Langreo y otra a la entrada de los tubos en la vertiente de Siero, permitirán a los vehículos de obra acceder a las zonas en las que se trabaja sin invadir el carril contrario. Además, se cortará la carretera local que cruza por encima de la AS-17 y llega a la localidad de La Zorera, por lo que se le habilitará un nuevo acceso que estará justo antes del primer túnel que se encuentra el conductor al circular en sentido Siero. Esta entrada se añadirá a la ya existente entre los dos túneles, en la parte derecha de la calzada. De esta forma, en ambos casos se evitará también girar a la izquierda e invadir el carril contrario para acceder a esta carretera local.

Los trabajos de desdoblamiento de la carretera de los túneles de Riaño, que formará parte de la futura autovía Avilés-Sama (AS-III), cuentan con un presupuesto total de 109 millones de euros y un plazo de ejecución de 30 meses. Las tareas se dividieron en dos tramos, que prácticamente equivalen a la vertiente langreana de la vía y a la zona sierense. La primera de ellas es la más compleja técnicamente. Transformar en autovía sus 3.294 metros de longitud costará 63,6 millones de euros. Las obras fueron adjudicadas a la unión temporal de empresas (UTE) formada por Dragados y Coprosa. El segundo tramo, el de Siero, tiene una longitud de 4,7 kilómetros y un presupuesto de ejecución de 45,5 millones de euros. Las obras las ejecuta la UTE formada por FCC Construcción y Alvargonzález.

El desdoblamiento se completará con la construcción de un nuevo enlace que permita la conexión entre la nueva autovía y la de Oviedo a Villaviciosa en San Miguel de la Barreda, en la misma zona en la que está el actual. El enlace costará 40 millones.

Velocidad máxima

La velocidad máxima de circulación se limitará a 40 kilómetros por hora. Actualmente, en la mayor parte del tramo es de 80, aunque también hay zonas limitadas a 60 por hora.

Carril de vehículos lentos

Se eliminará el carril de vehículos lentos en la vertiente langreana de la carretera. Además, se adelantará en 500 metros el final del carril de tráfico lento en la zona sierense.

Glorietas

Se habilitarán dos rotondas provisionales, una en la entrada de los túneles en sentido Langreo y otra en la entrada en dirección Siero. Las glorietas evitarán que la maquinaria que participa en las obras invada el carril contrario cuando deban acceder a las zonas en las que se trabaja.

Plazo

La Dirección General de Carreteras estima que las restricciones durarán 14 meses.