Rioseco, L. M. D.

El polígono empresarial de Comillera, en Sobrescobio, estará terminado en el mes de noviembre. Así lo confirmaron ayer técnicos de la empresa pública Tragsa, que junto a la presidenta de la compañía, María Luisa Graña, visitaron las obras de construcción de este espacio. Tragsa, además, levanta la ampliación de la Casa del Agua, una obra que tardará al menos otros «dos meses» en acabarse. Eso sí, en este caso el plazo de apertura al público aún no está definido.

María Luisa Graña hizo un recorrido por las diversas obras que en los últimos meses ha ejecutado Tragsa en el concejo coyán. La compañía pública, explicó, mantiene convenios de colaboración con «doce ayuntamientos» asturianos, en los que ejecutan obras que pueden ser medioambientalmente sensibles, como es el caso de Sobrescobio, que pertenece al parque natural de Redes. El polígono de Comillera, que habilitará nueve parcelas que suman una superficie útil de unos 7.000 metros cuadrados de terreno, estará listo «para el mes de noviembre». El alcalde, Marcelino Martínez, explicó que tres de estas parcelas están reservadas para la embotelladora de agua. «Llevamos un año trabajando con una empresa para que el proyecto salga adelante, pese a las dificultades económicas de este momento», señaló Martínez. El regidor también quiso «despejar todas las dudas sobre la legalidad de las adjudicaciones a Tragsa», unas «calumnias que salieron a relucir en campaña».

Las obras de la casa del agua, por su parte, se acabarán a finales de verano, pero la apertura de la instalación aún no tiene fecha porque dependerá «del nuevo Gobierno regional» y de la instalación de la nueva exposición. Las obras del polígono de Comillera tienen un coste total de 2,4 millones y las del museo, de 590.000 euros.