Langreo, Elena PELÁEZ

El Instituto de Mayores y Servicios Sociales (Imserso) ha suspendido temporalmente las obras de construcción del centro de referencia estatal para personas con graves discapacidades neurológicas de Langreo. La paralización se produce, según ha podido confirmar este periódico, al ser necesario elaborar un proyecto de actuaciones adicionales y su correspondiente contratación. El modificado dará respuesta a diversos problemas surgidos durante la ejecución de la obra.

La suspensión temporal será parcial ya que afectará a aquellas unidades de obra que no se puedan ejecutar por su vinculación con las nuevas actuaciones que se proyectarán. Este nuevo proyecto complementario se realiza con los informes favorables del arquitecto director de los trabajos de construcción del centro de discapacitados «Stephen Hawking» de Barros tras la solicitud realizada por el contratista.

La obra está en su recta final y centrada en la urbanización de los accesos. El retraso que acumula obedece a anteriores modificaciones que hubo que acometer en el plan de obra original, especialmente para abovedar el arroyo de Faedo, que discurre por las cercanías del equipamiento. Los trabajos arrancaron en diciembre de 2009, con un plazo de ejecución de 24 meses. Sin embargo, no concluyeron en la fecha prevista, el pasado mes de diciembre. La anterior ministra de Sanidad, Política Social e Igualdad, Leire Pajín, confirmó en su visita al centro en septiembre del pasado año que la actuación estaría lista para el primer trimestre de este año. Aludió entonces a diversos problemas surgidos durante la ejecución de las obras, la inestabilidad del terreno y las inundaciones.

Junio es el último plazo ofrecido desde el Gobierno central. Así se lo comunicó el director general del Imserso, César Antón Beltrán, a la alcaldesa de Langreo, Esther Díaz, en una reunión celebrada en Madrid el pasado día 10 de abril. Las «dificultades con un tendido eléctrico y con la Confederación Hidrográfica» son la causa de esas demoras, señaló la regidora tras el encuentro. El convenio para la construcción del centro de discapacitados de Barros que suscribieron el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, el Gobierno regional y el Ayuntamiento finalizó el pasado 31 de diciembre. Las tres administraciones acordaron prorrogarlo por dos años.

El proyecto de Presupuestos Generales del Estado de este ejercicio recoge una partida para finalizar la obra, de 3,3 millones de euros, pero no para el equipamiento del centro de referencia estatal para personas con graves discapacidades neurológicas. El Gobierno plantea destinar otros dos millones de euros en 2013 y 2014, uno cada año, para completar la inversión de 14 millones en el equipamiento. Dada esta situación, la alcaldesa pidió al director del Imserso la convocatoria de la comisión de seguimiento para abordar la necesidad de equipamiento del centro. La respuesta de César Antón fue positiva.

Junto con los plazos de apertura se debe abordar el modelo de gestión del complejo, que será pública aunque falta por determinar el grado de participación que tendrá el Principado. El centro de discapacitados de Barros fue diseñado por los arquitectos Francisco Noguera y Antonio Guedán y está siendo desarrollado por la unión temporal de empresas (UTE) formada por Construcciones Valmasedo y Rehabitec Lleida.

El equipamiento, que ocupa una parcela de más de 15.000 metros cuadrados, atenderá a personas con graves discapacidades neurológicas, principalmente a personas con daño cerebral y a afectados por la esclerosis lateral amiotrófica. El complejo dispondrá de 90 plazas, 60 de ellas de estancia temporal por un máximo de 18 meses, y 30 más de centro de día. El centro se ha desarrollado construyendo dos módulos conectados por un cuerpo central. Uno de ellos se dedica a la zona administrativa y el otro, al área asistencial. Está previsto que el proyecto cree 150 empleos, de los que un tercio corresponderán a especialistas en la atención a graves discapacitados neurológicos.