La seguridad en el Descenso Folklórico del Nalón, la principal fiesta de agosto en las Cuencas, se toma muy en serio. Son miles las personas que desfilan por las calles y que, luego, entran en el río Nalón, crecido por la suelta de agua de los pantanos para permitir a las carrozas navegar. Más de un centenar de personas volverán a velar este año por la seguridad de los asistentes.

El Ayuntamiento de Laviana acogió ayer una reunión para tratar estos temas. Estuvieron representantes municipales y de la Guardia Civil, la Policía Local, Protección Civil, del 112-Asturias y también de la organización, la Asociación de Amigos del Descenso Folklórico del Nalón. El alcalde, Adrián Barbón, resaltó que el objetivo del encuentro es lograr que la fiesta, que junta a miles de personas en Pola de Laviana, "sea cada vez mejor y cada vez más segura". Una de las cuestiones que se plantearon a la Guardia Civil de tráfico fue la posibilidad de "levantar la mano" con el tema del transporte de carrozas (el año pasado hubo multas), si bien la benemérita dejó claro que se iba a seguir siendo estricto.

Desde el grupo municipal de Somos, su representante en la reunión, Unai Castaño, preguntó sobre la posibilidad, ya planteada en años anteriores, de poner baños públicos portátiles en la fiesta. Castaño indicó que el Ayuntamiento tiene previsto esta edición de la fiesta implantar la medida. La XLVIII edición del Descenso Folklórico se celebrará este año el día 22 de agosto.