La menor de Lada que el pasado domingo dio a luz en casa y ocultó a su bebé en un trastero declaró ayer ante el Fiscal de Menores. La joven de 15 años recibió el alta hospitalaria el miércoles y ese mismo día pasó por la Comisaría Nacional de Policía de Langreo-San Martín del Rey Aurelio, citada para prestar declaración. Los agentes remitieron el atestado a la Fiscalía, imputando a la menor como presunta autora de un caso de abandono. Sin embargo, deberá ser el propio Ministerio Público el encargado de completar la investigación y dilucidar si hay base para presentar acusación contra la joven por algún tipo de infracción. El bebé, al que la familia ha puesto el nombre de Nicolás después de que las enfermeras del hospital Valle del Nalón lo bautizarán así, permanece en complejo sanitario comarcal de Riaño, aunque su estado de salud es bueno.

La madre del pequeño prestó declaración ante la sección de menores de la Fiscalía del Principado de Asturias en la mañana de ayer. Desde este organismo explicaron ayer que "tanto la menor como su familia mostraron su total colaboración" con la Fiscalía. Horas antes, la joven había acudido a la Comisaría, en presencia de sus padres y de su abogado.

Los hechos tuvieron lugar en la jornada del domingo. Según el testimonio de los padres de la menor a este diario, se encontraron a la joven en casa cuando salieron de trabajar, pasadas las tres de la tarde. La adolescente estaba sangrando, "casi muerta", según sus padres, que la trasladaron al hospital Valle del Nalón de inmediato. Los abuelos de Nicolás indicaron en su relato que la joven intentó decirles algo en el domicilio. Sin embargo, al ver su estado, "no paramos hasta llevarla al hospital".

La joven entró por Urgencias y, cuando los médicos pudieron estabilizarla, acabó por reconocer que había dado a luz y que el bebé se encontraba en el armario de un trastero del bloque de viviendas donde reside la familia, en Lada. El inesperado abuelo del pequeño se dirigió entonces a la vivienda en compañía de dos agentes de la Policía Nacional, pasadas las once de la noche. Los agentes explicaron a este diario que el bebé estaba envuelto en una toalla, en el fondo de un armario azul. También apuntaron que le cantaron nanas para que se durmiera. Los policías también remarcaron la colaboración prestada por el abuelo del pequeño Nicolás.

Los padres de la menor insistieron el pasado martes en que la menor "salvó la vida" del niño y y que "es una heroína" y no "ninguna asesina, como dicen por ahí". Los abuelos del bebé apuntaron que la adolescente cometió "un error" y que ocultó al bebé por miedo, pero que "no lo abandonó. También aseguraron que la familia no se plantea dar al bebé en adopción y que la menor seguirá estudiando y "tendrá sus responsabilidades como madre cuando salga del instituto".

Los padres de la menor de Lada también mostraron su malestar con el tratamiento dado al caso en las redes sociales y con algunos de los comentarios publicados en internet sobre los hechos ocurridos en Lada.