El Ayuntamiento de Langreo prevé habilitar más espacio en Valnalón para la implantación de nuevas empresas. Para ello proyecta un vivero de empresas y centro de desarrollo tecnológico, que se asentarían en la antigua factoría de Metalsa y dispondría de una superficie de 3.000 metros cuadrados. Es una iniciativa que tiene un presupuesto de 2.280.000 euros, para la que el Consistorio langreano ha solicitado ya financiación al Gobierno central a cargo de la partida prevista en el Plan Minero 2013-2018 para la reactivación de las comarcas mineras en el capítulo de infraestructuras.

Este es uno de los catorce proyectos presentados por el gobierno local al Principado, que se dirigirá a continuación a la administración central, que dispone de 250 millones de euros para destinar a iniciativas de las comunidades autónomas de Asturias, Castilla y León y Aragón. El centro destinado a empresas del sector tecnológico se instalaría en el edificio de oficinas y en el taller de ajuste de Metalsa. En éste último se podría disponer de 2.000 metros cuadrados a los que se sumarán los 700 metros cuadrados del edificio de oficinas y otros 300 metros adicionales. En total, 3.000 metros cuadrados para empresas tecnológicas.

Con este proyecto, el Ayuntamiento avanzaría en la rehabilitación de los edificios industriales del polígono de Valnalón, en La Felguera. Y fomentaría la instalación de más empresas junto a las instaladas actualmente en la zona. El presupuesto estimado por el Consistorio permitiría elaborar los documentos técnicos necesarios, obtener los permisos y licencias pertinentes y ejecutar las obras e instalaciones necesarias en el edificio para transformarlo en un vivero de empresas TIC.

El plazo de ejecución de los trabajos sería de 18 meses. Las instalaciones de Metalsa en las que se pondría en marcha la iniciativa municipal fueron cedidas por Arcelor-Mittal al Ayuntamiento en el año 2011. El Consistorio destaca como aspectos positivos para que se autorice la financiación necesaria para desarrollar el proyecto que la construcción que se pretende rehabilitar está ubicada en la ciudad industrial de Valnalón, que "cuenta con dotación de todos los servicios básicos y de fibra óptica con capacidades suficientes".

Los edificios cuya propiedad transfirió Arcelor-Mittal al Ayuntamiento de Langreo ocupan un superficie de 5.511 metros cuadrados. El destino previsto inicialmente, en el momento de suscribir el acuerdo, era la ampliación de Museo de la Siderurgia. También se preveía la puesta en marcha del Museo de la Aviación, impulsado por el Círculo Aeronáutico Jesús Fernández Duro, en la cabecera de la nave oeste número uno, de 1.200 metros de superficie. La cesión incluía también las oficinas, el taller de ajuste y el denominado grupo "Ilgner".

La negociación que el Ayuntamiento, con la entonces alcaldesa, Esther Díaz, al frente, mantuvo con la multinacional para ampliar el principal centro expositivo del municipio se inició en 2009, tras amenazar un año antes el gobierno local con expropiar la antigua factoría de Metalsa. Se preveía entonces que las obras comenzasen por el taller de ajuste aunque finalmente no se iniciaron. El destino que el nuevo ejecutivo municipal concibe para esas naves es de centro tecnológico.

Dentro de los catorce proyectos que, con una financiación de 21,4 millones de euros, el Consistorio presentó para que sean financiados con fondos mineros figuran otras iniciativas vinculadas a la creación de empleo en Valnalón. Una de ellas se centra en el acondicionamiento del edificio del centro de empresas de Valnalón para adaptarlo a la nueva tipología de las empresas, que nacen pequeñas. Las instalaciones cuentan con espacios de más de 40 metros cuadrados, que se reducirían, mejorando su comunicación. El presupuesto de esta actuación, que se ejecutaría en cuatro meses, es de 400.000 euros.

La rehabilitación del edificio de Los Relojes, dado el interés mostrado por una empresa en instalarse en un espacio en el que se podrían llegar a crear 120 empleos precisa 875.000 euros de inversión. También se apuesta por construir una guardería infantil.