El "divorcio" entre los dirigentes de la Federación Socialista Asturiana (FSA) y los responsables de la Consejería de Infraestructuras es cada día más patente. El último capítulo del desencuentro ha llegado tras lanzar hace unos días el consejero Fernando Lastra la idea de construir un funicular para acceder al santuario de Covadonga, rescatando un viejo proyecto de la época de Vicente Álvarez Areces como presidente autonómico. La propuesta de Lastra no ha sentado nada bien en la FSA, que ha dado la callada por respuesta.
El sector mayoritario del socialismo asturiano ha declinado realizar cualquier declaración sobre el funicular de Covadonga, a diferencia del resto de los partidos asturianos que, con matices, respaldan la propuesta o al menos están dispuestos a estudiarla. El silencio es toda una declaración de intenciones: "el que quiera interpretar, que interprete", señalaba ayer un destacado dirigente socialista, molesto por la actitud de Lastra y su equipo.
El sector que encabeza Adrián Barbón, mayoritario del PSOE asturiano, acusa en privado al Consejero de "ir por libre", algo que, en opinión de los dirigentes socialistas, resulta evidente con la propuesta del funicular de Covadonga, que "ni está incluido en el programa electoral, ni en los Presupuestos, ni en el crédito extraordinario". Además, Lastra ni consultó ni informó a la FSA de sus planes para Covadonga, por lo que los dirigentes socialistas conocieron la propuesta del funicular "por la prensa".
Lastra anunciaba el lunes en Covadonga un estudio de viabilidad para construir un funicular entre la finca de Les Llanes, propiedad del Principado, y el santuario. La inversión estimada se acercaría a los 12 millones de euros e incluiría un aparcamiento con 1.200 plazas en Les Llanes.
La propuesta, que cuenta con el respaldo de la Iglesia de Asturias y el Ayuntamiento de Cangas de Onís, es similar a la lanzada en 2007 por Álvarez Areces, que quedó aparcada al año siguiente, tras estallar la crisis económica. Entonces se anunció un ascensor panorámico de Les Llanes al santuario. Lastra adelantó que la opción más probable es que el funicular podría ser financiado y explotado por una empresa privada, aunque no descartó una participación pública.
El de Covadonga será un funicular de ladera, que recorrerá en tres minutos los 272 metros que separan Les Llanes de la zona trasera de la escolanía, salvando un desnivel de 90 metros y una pendiente del 35 por ciento. Podrá transportar a 1.200 pasajeros cada hora, con lo que se podrá dar respuesta a la máxima demanda: hasta 10.000 visitantes al día durante las etapas vacacionales.
No es el primer choque entre Lastra y la FSA. Tampoco sentó bien a los dirigentes de la Federación, por ejemplo, que el Consejero lanzara "por su cuenta y riesgo" el proyecto del área metropolitana central de Asturias, "sin ni siquiera informar al partido". Algunas fuentes del PSOE asturiano señalaron entonces que la FSA planeó un "boicot" al área metropolitana, extremo este que negaron rotundamente tanto los dirigentes socialistas como los alcaldes implicados.
