Las matemáticas levantan pasiones. O se aman o se odian, y a muy pocos resultan indiferentes. Los enamorados de las ciencias exactas, que haberlos, haylos, aseguran que si en la actualidad muchos jóvenes tienden a ver esta asignatura como aburrida o incluso odiosa se debe a que el número de buenos profesores capaces de conseguir que las matemáticas apasionen a sus alumnos es muy pequeño. Lo explica Ángel del Riego, un estudiante de 20 años natural de Ore, pueblo perteneciente al municipio de Valdés, que ostenta el cargo de coordinador del movimiento denominado "Virus Matemático" en Asturias, dedicado a crear conciencia de la importancia de esta ciencia, base de todas las demás, y la situación en la que se encuentra. Para ello, esta agrupación busca reunir a jóvenes de todo el mundo e impulsar ideas que tengan que ver con la materia, con el fin de promocionarla y conseguir más adeptos.
Del Riego, aficionado a las Ciencias Políticas y a la música, busca dar visibilidad a las matemáticas al considerarla "una ciencia imprescindible en el día a día". Explica que muchos jóvenes tienen la impresión de que la asignatura es "aburrida o monótona", pero, sin embargo, "nos ayuda cotidianamente. Puede verse, por ejemplo, con las estadísticas que estamos acostumbrados a ver últimamente en la televisión por la pandemia del coronavirus", explica. El joven estudiante lleva dos meses en el "cargo". "Me gusta estudiar por mi cuenta, y por casualidad me encontré con este movimiento. Poco tiempo después me ofrecieron ser coordinador de él en Asturias y decidí aceptar", declara.
El chaval cree que "el problema" se resolvería haciendo de esta ciencia algo divertido en las aulas. "Cada persona tiene gustos diferentes. Una forma por la que muchos jóvenes pueden mostrar interés es juntar las matemáticas con asuntos como puede ser la historia. Es como yo empecé a interesarme en esta materia y es una manera muy entretenida de hacerlo. En la cuenta @virusmatematicoast suelo subir bastantes publicaciones sobre acontecimientos históricos en los que las matemáticas jugaron un papel fundamental. Mucha gente está mostrando interés por juntar ambas cosas, y es que, en mi opinión, es una forma muy divertida de aprender", comenta el estudiante.
La mala conexión de los pueblos con las grandes urbes es una cuestión que también se ve reflejada en las publicaciones de Del Riego. "Hablo bastante sobre los problemas que tenemos en las zonas rurales de Asturias para formarnos. Somos muchos los que tenemos problemas de transporte y, cuando queremos estudiar a distancia, tenemos la barrera de los problemas de conexión a internet.
El director del movimiento, Nicolás Atanes, se reunió el pasado 29 de julio con miembros de la Consejería de Educación de la Comunidad de Madrid con el fin de reivindicar el papel de las matemáticas en la sociedad y acabar con el creciente odio de los jóvenes a esta ciencia. "La reunión fue bastante mejor de lo que pensaba. El consejero (Enrique Ossorio) me escuchó, y me ánimo a seguir adelante. Me pareció buena idea reunirme con él y no me arrepiento. Aunque me encantaría poder reunirme también con consejeros de otras materias para no focalizar las matemáticas con la educación solamente", declaró Atanes.
