Félix Martín, responsable de área del Centro Tecnológico Ikerlan del País Vasco, especializado en la digitalización industrial y en la transferencia tecnológica a las empresas, lanzó ayer una advertencia clara en la Escuela Politécnica de Ingeniería: "se necesitan profesionales, no cubrimos todos los puestos". Por eso, ayer presentó a los estudiantes el centro y las líneas de trabajo, así como las posibilidades para realizar el doctorado, trabajo fin de estudios y prácticas en el centro justo cuando acaba de formalizar una cátedra de formación con la Universidad de Oviedo.
- ¿Qué busca Ikerlan en Gijón?
-Alumnos que puedan desarrollar su carrera investigadora con nosotros, por lo que todos los años venimos a presentar nuestra oferta y a ver si se animan a ir allí. Con la cátedra que acabamos de firmar buscamos además que la propia Universidad pueda acoger a chavales con recursos de Ikelan, que los vaya formando para que después sean cantera para nuestra empresa. Y de paso, que la Universidad se beneficie de esos chavales que trabajen con ellos y les permita desarrollar sus actividades de investigación.
- ¿Son un buen fichaje los alumnos de ingeniería de esta Escuela?
-Sin duda alguna, tanto a nivel técnico como humano, que también es importante, porque al final tan importante es saber como querer hacer cosas, el compromiso, la integración y la implicación con el trabajo. Y eso es algo en lo que la relación ha sido muy buena en los años que llevamos colaborando.
- ¿En qué líneas investiga Ikerlan?
-Sobre todo en mecánica y mecatrónica en la actualidad: temas de fatiga, rotura de componentes... sobre todo pensando en el sector eólico y las energías renovables en las que nos estamos centrando en los últimos tiempos.
- ¿Es el sector industrial más pujante ahora mismo?
-Son los que están tirando un poco de la industria, y los que además están planteando retos más innovadores. Otros sectores están tirando de tecnología ya existente, y los retos más novedosos en la parte mecánica se asocian sobre todo en este sector: cada vez se hacen molinos más grandes, que aguantan más cargas, que van al mar y tienen que soportar ambientes hostiles.
- ¿Es un buen campo de trabajo?
-Es muy interesante, porque además revierte a la sociedad, estamos haciendo algo por cuidar al medio ambiente, yendo a un modelo más sostenible.
- ¿Hay demanda de profesionales?
-En estos momentos hay mucho trabajo, la demanda es mayor que la oferta con lo que necesitamos de los alumnos de la Escuela. Les presentamos cuáles son las ofertas que tenemos y lo que pueden llegar a cobrar si van con nosotros; no son ofertas ficticias sino reales porque realmente necesitamos profesionales.
- ¿Es una tendencia de todo el sector industrial?
-Ahora mismo todo el sector industrial está necesitado de ingenieros, y en el País Vasco en concreto es una necesidad acuciante para todas las empresas.
- ¿Por qué hay tan pocos ingenieros?
-Es una buena pregunta, si vemos las estadísticas cada vez menos gente cursa carreras técnicas y crecen las Humanidades u otras cosas. Igual es un problema nuestro, que tenemos que ser capaces de ser más atractivos a la hora de comunicar, de presentar lo que hacemos y de ver que esto también aporta a la sociedad. La parte de ingeniería es muy importante porque mantiene nuestro tejido industrial, es de lo que vivimos y su labor puede hacer mejorar la sociedad. Las energías renovables no van a llegar solas, sino que van a llegar de la mano de la tecnología que estamos aplicando para hacerla más rentable.
- ¿Hasta dónde prevén que siga creciendo el sector?
-Llevamos un montón de años creciendo y la tendencia parece que no para ahí. Hace 20 años un molino de viento tenía medio megavatio, luego llegaron los de tres y cuatro megavatios y estamos diseñando ya eólicos de quince megavatios. Los siguientes serán seguramente más grandes todavía, con lo cual el reto tecnológico va a seguir existiendo.
- ¿Está España bien posicionada en este contexto?
-A día de hoy sí; hay grandes empresas españolas que se dedican a este sector y hay grandes proveedores, con lo cual estamos exportado mucho a Inglaterra, Alemania, a los países del norte y a Estados Unidos.
- ¿Cómo afianzará la cátedra la relación entre las partes?
-Lo que buscamos esencialmente es ampliar la colaboración entre las dos instituciones, y lo que ha sido una relación hasta ahora personal, que se transforme en una relación institucional para poder mover a más gente que se sume al proyecto.
- ¿A cuántos alumnos puede tutelar Ikerlan?
-El año pasado tuvimos a seis chavales de aquí haciendo el trabajo de fin de máster con nosotros y tres de ellos se han quedado a hacer la tesis doctoral este año. Tenemos capacidad para entre diez y quince personas sin problema en la actualidad.
