Ante la previsión de un San Mateo muy limitado por las medidas sanitarias para prevenir contagios del covid, la iluminación festiva de las calles, que ya se ha empezado a desplegar por toda la ciudad, también tratará de enfriar la fiesta y alumbrar una celebración contenida y con llamadas a la prudencia.
Según explicaron fuentes del área de alumbrado, dependiente del concejal Nacho Cuesta, dada la merma en las celebraciones, sin chiringuitos, sin las casetas gastronómicas del Campo de San Francisco, sin desfile del Día de América, sin grandes conciertos multitudinarios ni aglomeraciones en la plaza del Ayuntamiento para el pregón, se ha decidido también un despliegue más contenido de luces donde se aproveche para recordar a los ciudadanos la necesidad de tratar de evitar contagios. En ese sentido, el lema que figurará en varias de las guirnaldas de luces será el de "San Mateo con responsabilidad".
Ese tipo de adornos no estarán presentes de una forma masiva en todas las calles. Al revés, se repartirán menos luces por zonas estratégicas. Sí habrá iluminación en el casco viejo, las zonas del centro, las arterias comerciales y los barrios, pero se descartan algunos juegos de luces muy llamativos utilizados el año pasado que luego se repitieron en Navidades, como los que dibujaban una especie de pórtico en los accesos al Campo de San Francisco.
La idea de estas fiestas más contenidas es concentrar las luces en aquellas zonas donde la concejalía de Festejos dirigida por Covadonga Díaz ha concentrado la actividad. Así, habrá luces cerca del Auditorio Príncipe Felipe, donde se desarrollarán todos los conciertos, desde la gala lírica a las actuaciones de pop y rock; también iluminación específica cerca del Calatrava, que albergará actividades infantiles (con reserva de entradas ya disponibles en la web entradas.oviedo.es), en la plaza del Conceyín en la Corredoria o en el Bombé, que sin casetas de hostelería sí acogerá a grupos folclóricos, a la banda municipal o a la banda de gaitas.
