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Las bolsas, el acero y el crudo se hunden, y se disparan el oro y los bonos por el virus

La exposición de Asturias a los países más afectados es baja, pero la del mercado europeo, con gran impacto en la región, es muy acusada

Las bolsas, el acero y el crudo se hunden, y se disparan el oro y los bonos por el virus

ArcelorMittal, el mayor fabricante mundial de acero y titular de la siderurgia integral asturiana, fue el cuarto valor más bajista ayer en el índice selectivo bursátil Ibex 35, con una caída del 6,76%, impactado por la crisis del coronavirus, que ha sacudido a todas las Bolsas (la española cedió el 4,07%, el mayor descenso desde el referéndum del Brexit en 2016) y extremó el castigo al sector turístico (aerolíneas y cadenas hoteleras), a los productores de materias básicas e intermedias y a la industria en general ante el temor a una paralización brusca de los flujos de bienes, servicios y viajeros, la interrupción de las cadenas globales de producción y a un enfriamiento súbito de la economía y del comercio mundiales.

Entre las materias primas, el oro, del que Asturias es la única región productora del sur de Europa, se zafó del fuerte revés experimentado por los valores más cíclicos y su cotización -al alza desde que se conoció la emergencia sanitaria por su condición de valor refugio en tiempos de turbulencia-, remontó ayer otro 2% y alcanzó máximos no vistos desde principios de 2013, justo antes del inicio de la recuperación: el metal dorado superó los 1.680 dólares por onza.

También se disparó la demanda de bonos públicos por los inversores que, temerosos de una eventual pandemia, huyen de la renta variable para refugiarse en la renta fija con garantía de los estados. Los bonos soberanos subieron de precio y redujeron por ello su rentabilidad en la generalidad de los casos, con alguna salvedad, caso de Italia, penalizada por la percepción de riesgo ante los brotes del coronavirus COVID-19 en las zonas industriales de la tercera economía de la UE. El rendimiento de la deuda transalpina avanzó y su prima de riego (144 puntos básicos frente a 69 de España) se situó sólo 3 puntos básicos por debajo de la de Grecia.

A la inversa, el petróleo, muy sensible a la marcha de la economía y a los avatares mundiales, perdió en torno al 5% en el caso del tipo Brent (de referencia en Europa), que se pagaba ayer a 55,35 dólares por barril, en previsión de una menor demanda de crudo.

Los mercados están reflejando así el enorme nerviosismo e incertidumbre por la evolución de los acontecimientos.

La CEOE llamó a la prudencia y a evitar los alarmismos; la ministra española de Economía, Nadie Calviño, explicó que es prematuro hacer pronósticos e hizo invocaciones a la calma (estima que si el problema se controlase en el primer trimestre, el PIB mundial podría compensar el impacto en lo que resta de ejercicio), y el G20 (el grupo de las veinte mayores economías del planeta) indicó este domingo que, salvo las incertidumbres por el coronavirus y las políticas arancelarias, se aprecian signos de un repunte del crecimiento económico mundial para 2020 y 2021.

Asturias. El impacto directo en Asturias de las economías con el mayor número de casos de contagio es relativamente pequeño, pero ningún mercado va a quedar al margen de las consecuencias si se extiende el contagio y la economía encalla.

China es el destino del 1,4% de las ventas asturianas en el exterior y el origen del 5,8% de las importaciones, mientras que Italia representa el 9,2% de las exportaciones y el 3,2% de las compras asturianas en el extranjero. En los casos de Corea del Sur e Irán (otros dos países afectados), el peso en el comercio exterior asturiano es ínfimo. Asturias vendió el año pasado al conjunto de esos cuatro países menos de 94 millones y les compró por encima de 31 millones.

Pero la exposición europea a China es muy alta (sobre todo de Alemania) e Italia es la tercera economía del área. Un enfriamiento europeo por esta causa tendría un coste elevado para España y Asturias. Las empresas del Principado dirigen a la UE el 72,6% de sus exportaciones.

Planes de contingencia. Aunque la tasa de mortalidad no es muy elevada, la capacidad de propagación del coronavirus parece alta y se sabe que al menos varias empresas asturianas están evaluando planes de contingencia de teletrabajo desde los domicilios de sus empleados para el supuesto -dijo una persona conocedora- de que el virus pudiera llegar a la región y se tuvieran que adoptar medidas de aislamiento e inmovilización de la población como se ha hecho en China e Italia.

Asturex y Easy Best. La Sociedad de Promoción Exterior del Principado de Asturias (Asturex) indicó ayer que no ha alterado su actividad no pospuesto ninguna acción comercial. Su responsable, Teresa Vigón, señaló que hay empresas asturianas que fabrican en China que tienen pedidos detenidos y otras (sobre todo las que importan bienes intermedios) que tendrán problemas de abastecimiento dentro de un mes por las paradas de las fábricas, algunos puertos y el transporte interior. Estos dos últimos factores afectan también a las importaciones que recibe China del exterior, caso del Principado.

Grandes multinacionales, como la informática estadounidense Apple, no sólo están experimentando dificultades para recibir los componentes que produce en China sino que se les han desplomado las ventas en el gigantesco mercado del país asiático en tasas del 85% desde enero en comparación con el mismo periodo de 2019. Otras, como la cadena británica de moda y textil Primark, están cubriendo sus necesidades con el almacenamiento que había hecho de producto chino en prevención de las vacaciones del Año Nuevo del país (fines de enero) y en este momento buscan suministradores alternativos en el Sudeste asiático. Otro tanto está haciendo alguna empresa asturiana del sector.

Orencio Grela, directivo asturiano de la compañía hispano-china de consultoría de inversiones entre ambos países Easy Best Europe, con sede en la región, explicó que se trata de un "problema mundial" pero que no debe incurrirse en "alarmismos". Puede haber impacto, señaló, porque hay fábricas y puertos parados y esta carencia de producto tenderá a elevar los precios en el mercado internacional. En el caso de Asturias, aunque la exposición es pequeña, "quienes comercian con los países afectados lo notarán", dijo. No obstante, apuntó que, "China saldrá adelante" y que "esto hay que verlo como una oportunidad para la región". "Asturias mira mucho a Europa y Latinoamérica, y debería dar un giro estratégico: la gran oportunidad", indicó, "está en China".

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