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Asturias anuncia un cambio histórico en sanidad que impulsa la consulta telefónica

"Probablemente la asistencia nunca vuelva a ser igual", dice el consejero de Salud l Los centros intercalarán citas presenciales y telemáticas

El consejero de Salud lanzó ayer un mensaje de cambio de época en la sanidad pública asturiana que comenzará ya mismo, en el proceso de desescalada de la pandemia de COVID-19: "Probablemente la actividad asistencial nunca vuelva a ser como la que conocíamos", vaticinó Pablo Fernández Muñiz. Y añadió: "Puede ser una oportunidad de mejora y de ganancia de eficiencia que no deberíamos desaprovechar".

Dicho de otro modo, la pandemia de COVID-19 ha obligado a implantar una serie de prácticas asistenciales novedosas: unas seguramente perderán razón de ser dentro de un tiempo y otras han venido para quedarse.

¿Y en qué línea puede avanzar ese cambio histórico? En los próximos meses, en los que aún estará presente el virus, un objetivo prioritario será evitar aglomeraciones y contagios en los centros sanitarios. El desafío tiene calado, pues los médicos se temen un aluvión de pacientes que en estas semanas han soportado en silencio sus males, particularmente enfermos crónicos. En los servicios de urgencias de los hospitales ya han comenzado a percibir un aumento de la afluencia de usuarios con respecto a las primeras semanas de confinamiento domiciliario.

Con el citado objetivo de extremar la prevención, en las instalaciones sanitarias se habilitará un doble circuito: uno para pacientes infectados por el coronavirus y otro para no infectados. Asimismo, se impulsará la realización de algunas pruebas a la entrada de determinados circuitos. Y tanto en centros de salud como en hospitales se establecerán espaciamientos de pacientes en consultas, pruebas y quirófanos.

En consonancia con estas exigencias preventivas, el Gobierno regional se propone impulsar la "atención sanitaria no presencial", señaló el Consejero. Es decir, siguiendo con lo que se está haciendo en estas semanas de pandemia, una parte de la relación entre el médico y la enfermera con el paciente se realizará por vía telefónica y, más adelante, mediante videoconferencia. Este mecanismo se aplicará "en todas las actividades asistenciales que lo permitan", indicó Pablo Fernández. Como añadido, se reducirá la burocracia, lo que redundará en menos visitas a los centros para llevar y recoger documentos o realizar otras gestiones.

La atención primaria ha tenido "un papel clave" en estas semanas de lucha contra la pandemia, enfatizaron el titular de Salud y la gerente del Servicio de Salud del Principado (Sespa), Concepción Saavedra, en su comparecencia de ayer ante el grupo de diputados de la Junta General del Principado que realiza el seguimiento del proceso pandémico.

La cuestión es que, a juicio de las autoridades sanitarias, esa transformación no va a pasar a la historia como algo transitorio, sino que en parte va a quedarse como elemento estructural, principalmente -según se deduce de las declaraciones de ambos- en la dinámica cotidiana de los centros de salud. "La pandemia ha puesto en valor definitivamente la telemedicina, y la ciudadanía ya es consciente de que con frecuencia se puede realizar una asistencia sanitaria no presencial con calidad", destacó el titular de Salud.

Entre tanto, Concepción Saavedra concretó algunos aspectos del despliegue inmediato de la desescalada. "La reorganización va a continuar", aseveró la gerente del Sespa, quien corroboró lo dicho por el Consejero: se evitará "la masificación de los centros" y se diseñarán "dos circuitos: uno para pacientes con COVID-19 y otro para recuperar la actividad normal". Se espaciarán las consultas y agendas, y para ello "se irán alternando los pacientes presenciales con la atención telefónica y las videollamadas". Asimismo, "se reforzará la atención domiciliaria". Y en las próximas semanas, los profesionales sanitarios adoptarán una actitud "proactiva" con llamadas telefónicas a todos los pacientes más vulnerables y crónicos que puedan haber sufrido de forma especial durante la pandemia, precisó Concepción Saavedra.

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