Boal, Ana M. SERRANO

La entrega de las ocho viviendas sociales de Boal tendrá que esperar un poco más. Si antes los problemas se centraban en la falta de terrenos para acondicionar los accesos a los garajes, que finalmente serán locales sin utilidad definida pero nunca dedicados a bajos comerciales, ahora lo es el plazo de entrega.

La Consejería de Vivienda y Bienestar Social asegura que los pisos sociales no se han entregado a sus adjudicatorios porque el edificio no tiene acometida de luz, es decir, que la compañía eléctrica no ha realizado todavía los trabajos contratados y aunque el edificio esté completamente construido, «hasta entonces no podemos concretar una fecha».

Los ocho adjudicatorios esperan noticias de la entrega de las llaves desde el pasado septiembre, según ellos la fecha prevista incialmente para acceder a las viviendas. Los afectados se quejan de las continuas especulaciones sobre los porqués de los retrasos. Además, explican que si han accedido a un piso social es porque lo necesitan: «Hay gente que está viviendo en lugares infrahumanos», comenta una de las afectadas.

En cuanto a los garajes, no está todo dicho. El Principado mantiene que la posibilidad de habilitar los bajos del edificio como garajes no está del todo descartada. Eso sí, depende de la capacidad del Ayuntamiento de Boal para llegar a un acuerdo con el propietario del terreno colindante con las viviendas sociales. Al parecer, cabría la posibilidad de que el gobierno boalés realizara un permuta con el dueño de la superficie que estaría afectada por las obras. Y el Principado entiende que este extremo no es de su competencia.

Lo habitual en los municipios es que los ayuntamientos cedan el suelo para construir las viviendas de protección oficial, que levanta el Principado y dirige a familias con rentas bajas con el objetivo que de que puedan acceder a una vivienda digna pagando como máximo el 20 por ciento de sus ingresos anuales.

La Consejería de Vivienda anunció en el año 2006 la construcción los pisos sociales del concejo de Boal. En el primer proyecto estaba previsto acondionar garajes, algo que se descartó sobre la marcha por no disponer de terreno suficiente. Si antes los adjudicatorios creían que este contratiempo retrasaba la entrega de las llaves, ahora parece que no afecta al plazo de entrada previsto por los inquilinos. Los afectados tendrán que esperar un nuevo trámite para estrenar vivienda. El Principado informa, en todo caso, de que el plazo de construcción de estos edificios se calcula sobre 16 y 24 meses.