Doriga (Salas),

Lorena VALDÉS

La empresa Acciona, encargada de ejecutar el tramo Grado-Doriga de la autovía que comunicará Oviedo con La Espina (Salas), acaba de retomar los trabajos en la conexión del tramo con el Corredor del Narcea, último escollo para la entrada en funcionamiento de estos cuatro kilómetros, prevista por el Ministerio de Fomento para el mes de julio, tras cinco retrasos.

El alcalde de Salas, José Manuel Menéndez, se mostró ayer muy satisfecho por la reanudación de la obra. «Más vale tarde que nunca. La finalización de la autovía es muy importante, pero, hoy por hoy, el objetivo primordial es que se abra este tramo Grado-Doriga y así eludir Cabruñana», explicó el regidor. Menéndez adelantó que «el plazo de ejecución que maneja la empresa es de tres meses, por lo que que, en julio, podrá estar abierto; esperemos que a la segunda vaya la vencida y no haya argayos», añadió.

Un desprendiemiento de tierra se llevó por delante lo poco que se había construido del enlace del tramo con el Corredor del Narcea el pasado mes de octubre y forzó a Fomento a elegir una alternativa cercana a la prevista inicialmente.