En 2007, el grupo de música rock «Bacotexo» (jaleo en la fala tapiega) irrumpe como la fuerza del Nordeste con un trío de jóvenes tapiegos de una calidad musical más que notable. Son ellos Daniel García (batería, guitarra rítmica y coros), Marcos Nogueiro (voz solista y guitarra rítmica) y Ricardo Saavedra (bajo y coros), con sendas carreras universitarias superiores y sus correspondientes trabajos profesionales. Sin embargo, fue mayor la fuerza de su vocación musical, por lo que sintieron la necesidad emocional de juntarse, con el rock y la fala en sus atriles.

Como méritos añadidos, primero hay tener en cuenta que el rock es un movimiento urbano y que, además, tiene en la lengua inglesa su más expresiva forma de comunicación. Pues bien, ni desde la ciudad, sino desde Tapia de Casariego, ni tampoco con el inglés, sino con la fala.

De sus componentes, Ricardo fue músico fundador del también grupo rockero «Baylon Chat», con el que grabó cuatro discos; Marcos es músico autodidacta, mientras que Dani participó también en varios conciertos con su compañero Ricardo. Con estos mimbres y la fala se pusieron manos a la obra. No era tarea fácil. Hasta aquí la comarca eonaviega y en lo que a música se refiere tan sólo había empleado la fala en discografía folk, en grupos como «Os Teixois» (de Taramundi), «La Reina del Truébano» (Navia), «Marino Tapiega» (Banda de Gaitas de Tapia de Casariego), «Cádaba» (El Franco), «Darbukka» (Taramundi) o «Mezá» (Boal).

Sin embargo, para «Bacotexo», la fala presenta una musicalidad especial, unos tintes melódicos que le han permitido expresarse a partir de unas sensaciones mucho más auténticas. Pero, además, la fala, para «Bacotexo», es una forma de homenajear el habla de su niñez, a sus familias, su origen y, en definitiva, la cultura del occidente de Asturias. Es en este sentido donde, además de sus propias letras (son la mayoría), eligen a la escritora franquita María José Fraga como exponente de la nueva literatura en fala (canción «Espiral», de su segundo disco).

De esta forma, y sin renunciar a las viejas formas de identidad rockera, «Bacotexo» se presenta con una música envuelta en un cierto aire romántico («El muelle de fora», «Canciós de revolución» o «Recordo», de su primer CD; «Tarde» y «Esperáime pra San Blas», de su reciente segundo disco). Es el mismo romanticismo que les hace plantearse no vivir de la música, sino para la música. Precisamente esta situación libérrima, no sin la referencia del grupo inglés «Queen», es la que les ha regalado el lujo de realizar dos grabaciones discográficas (por ahora) cuándo y cómo les ha dado la gana. La primera de ellas, «A máquina del tempo» (2008), es un conjunto de doce canciones, de las cuales «Queimando el cielo» ya ha merecido el premio al «Meyor cantar» 2009, al tiempo que al propio grupo tapiego se le concedió el de conjunto revelación de los premios «Amas» del mismo año. La segunda grabación, «Homes invisibles» (finales de 2011), presenta otra docena de canciones rockeras, algunas de las cuales tienen un cierto aire pop, blues e incluso country-folk. Y todo ello aderezado con unos textos cuidadísimos (su componente, Ricardo, es doctor en Filología) y siempre con la fala, directa al corazón.

Considerado en la actualidad entre los mejores grupos de Asturias, sus composiciones forman parte, igualmente, de tres grabaciones recopilatorias: «Ye lo que pasa» (2009), un CD editado por la Xunta Pola Defensa de la Llingua Asturiana; «100 años de música asturiana grabada. Lo mejor del rock» (2009), editado por este diario LA NUEVA ESPAÑA, y «Conceyo de Cantares» (2010), con la edición de la Oficina de Coordinación Cultural y Llingüística del Parque Histórico del Navia.