Vegadeo,

T. CASCUDO

«El proceso electoral es injusto y va en contra de los que luchamos por la jornada continua». Así se expresa César Álvarez, el portavoz de las familias que llevan semanas trabajando para implantar en el colegio «Jovellanos» de Vegadeo la jornada escolar continua, después de que su iniciativa no saliera adelante a pesar de recibir prácticamente el 83 por ciento de los votos. Su queja se refiere a que el sistema electoral impuesto por Educación determina que para sacar adelante la jornada continua es obligatorio el apoyo de las tres quintas partes del censo electoral, con lo que las abstenciones juegan un papel clave.

De hecho, en los comicios celebrados el martes se registraron 196 votos a favor de la jornada continua, es decir, del horario unificado por la mañana, y 41 en contra. Ateniéndose a estos datos, la jornada continua saldría adelante por una holgada mayoría. Pero el problema es que el sistema tiene en cuenta el censo total de 365 personas llamadas a las urnas. Así pues, la abstención de 128 de los votantes determinó el resultado final y tumbó la posibilidad de un horario continuado de nueve y media a dos y media. «Los resultados decepcionan pero no por los que votan que no, sino por los que no ejercen el derecho al voto. Pero hay que pensar que con el trabajo que hicimos para dar información y explicar todo el proceso, todos entendieron que no ir a votar era decir que no a la jornada. No obstante, hay que dar las gracias a todos los que fueron a votar», incide Álvarez.

Ahora las familias estudiarán a fondo los resultados para determinar en qué ciclos obtuvieron mejores resultados. La semana pasada los partidarios de la jornada continua avanzaron que la mayor abstención se produce en los ciclos superiores, en el caso de alumnos que se van a marchar del centro en cuestión de meses y que pasarán al instituto, donde ya dispondrán de esa jornada continua. De ahí que las familias hicieran un llamamiento a la solidaridad de los padres en esta tesitura.

Los promotores de la jornada continua desarrollaron la semana pasada tres jornadas informativas para divulgar las ventajas de uno y otro sistema y garantizar que todo el mundo votase conociendo a fondo la situación.

Así las cosas, el próximo curso el Jovellanos seguirá como hasta ahora: los alumnos entrarán a las nueve y media de la mañana y saldrán del centro a las cuatro y media de la tarde. A la una pararán para comer y de dos a tres tendrán el recreo del mediodía. Este es el tercer intento de parte de las familias y la dirección del centro de sacar adelante un horario continuado que ya funciona en los colegios de Castropol o Tapia.