Decenas de vecinos de Castropol trabajan en estos momentos a contrarreloj para que las calles del casco antiguo de la villa luzcan con sus mejores galas en el amanecer de este domingo, cuando se festeja el Corpus Christi. Tras la misa solemne, que está prevista para las doce y media, se procederá a la tradicional procesión por las calles engalanadas con alfombras florales.

Primero, irá el cuerpo de Cristo, bajo palio, seguido por los niños y niñas de primera comunión llevando a hombros al Niño Jesús y a la Virgen, y siempre acompañados por la banda de gaitas "El Penedón". En total, casi un kilómetro de flores en la villa de Castropol, siguiendo el recorrido por las calles Acevedo, Amor, El Campo, Penzol Lavandera y la plaza del Ayuntamiento.

Dionisio Iglesias, Jesús Fernández y Pedro Villares, de la asociación "El Pampillo" encontraban ayer "picando el verde", es decir, preparando las hojas de ciprés para su colocación. "Llevamos quince días sólo con el ciprés. Aún quedan las hortensias, y el resto de flores. Esperemos que el viento nos respete este año", explica Iglesias, quien añade que en la tarde de mañana se comenzará a trabajar sobre el empedrado de las calles para instalar estas muestras de arte efímero.

"Este año la novedad es una creación realizada por los niños de la escuela de alfombristas, que es la primera vez que participan de esta forma en esta fiesta de interés turístico regional", señala el alcalde de Castropol, José Ángel Pérez. "Si el tiempo acompaña, podrán ver algo maravilloso, que nunca vieron", animó.