El gobierno de Valdés aprobrará mañana en un pleno extraordinario una ordenanza de tenencia y protección animal específica para el concejo y que sancionará con multas de hasta 3.000 euros el maltrato en animales domésticos observado, de oficio, por la Policía Local o la Guardia Civil o mediante queja, según el concejal de Hacienda, Ricardo García. La norma contiene además la creación de un albergue para animales abandonados, que se financiará a través de los presupuestos municipales.
Según la ordenanza, los animales abandonados en Valdés pasarán a estar bajo la tutela del Ayuntamiento. Si el propietario aparece, tendrá que abonar los gastos de recogida, manutención y veterinario a razón de 10 euros por día.
La normativa prohíbe el uso de animales en actividades "que puedan ocasionar sufrimiento" o que lo conviertan en "objeto de burla". También suspenderá actividades con animales "si hieren la sensibilidad de las personas que las contemplan", entre otros planteamientos. Tampoco permite obsequiar o distribuir animales "como regalo o premios de sorteo" ni la estancia de perros en las zonas verdes y arenadas de las playas del concejo durante el verano o en zonas verdes o parques infantiles. En cuanto a la Reserva Natural de Barayo, el Ayuntamiento no autoriza la visita de animales domésticos, salvo la de aquellos relacionados con las actividades agropecuarias.
Una vez que entre en vigor la norma, el Ayuntamiento deberá disponer de un censo de animales. Además, en caso de "maltrato, tortura, síntomas de agresión física o desnutrición" de un animal el Ayuntamiento se encargará de la atención, pero los gastos los pagará el propietario por la vía del apremio, "con independencia de las sanciones económicas".
El Ayuntamiento de Valdés tendrá además la obligación de organizar campañas para difundir el respeto por los animales en los colegios, y la entidad de protección animal sin ánimo de lucro que coopere con la administración local deberá hacer campañas de divulgación sobre la conveniencia de esterilizar a los animales de compañía.
Las infracciones se tipifican como leves (entre 300 y 750 euros), graves (entre 751 y 1.500 euros) y muy graves (entre 1.501 y 3.000 euros).
