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Los ganaderos, llenos de dudas ante las nuevas subvenciones agrarias europeas

El 15 de junio finaliza el plazo para pedir ayudas de la PAC, que este año exigen una correcta declaración de la superficie útil de cada explotación

Parte de los ganaderos cangueses que asistieron a la ponencia sobre la PAC. DEMELSA ÁLVAREZ

Los ganaderos y agricultores se encuentran en plena campaña de solicitud de ayudas directas de la Política Agraria Común (PAC), a las que pueden aspirar hasta el día 15 de junio, y todavía son muchos los que aprovechan las últimas charlas sobre los cambios que se han introducido en las subvenciones para intentar entender cómo se conformarán y cómo se traducirá en una cuantía económica lo que los trabajadores del campo percibirán de Europa.

A menos de un mes de que se cierre el plazo de entrega de solicitudes, las dudas en el sector son palpables. Uno de los principales problemas que se encuentran los interesados "es que tienen que hacer una declaración de superficies muy correcta para la subvención", según explica María Otero, técnica de Aseagro encargada de impartir ayer la charla sobre la nueva PAC en Cangas del Narcea, dentro de una jornada técnica organizada por Campoastur.

Precisamente, la superficie es algo que trae de cabeza a muchos ganaderos, que han recibido cartas en las que se les comunicaba la exclusión de una parte de sus terrenos por no estar considerada apta para el pastoreo o para trabajarla. "Me quitaron un montón de hectáreas, 20 en total, y quiero recurrir, pero nadie me dice cómo hacerlo, tenemos una normativa que no saben aplicar y ahora tenemos mucha incertidumbre", explica Amelia Díaz, encargada de una ganadería ecológica.

María Otero explica que solucionar los problemas con el terreno y las fincas declaradas es muy importante "porque lo que declaren ahora es lo que van a comprometer para cinco años, les asignarán unos derechos de pago básico por esa superficie que después deben mantener en unas condiciones adecuadas". Por ello, Otero aconseja que no se incluya superficie que no se vaya a aprovechar para la explotación, "deberían incluir solo lo que el ganadero puede llevar, lo que conoce, siega y pastorea", insiste.

La premisa de la que parten todos los ganaderos es que esta reforma de las ayudas supondrá un recorte general, aunque todavía no lo pueden valorar; "no sabemos si vamos a ganar o a perder porque no conocemos cómo valorarán la superficie que declaramos", explica Antonio López.

En este sentido, la ponente cree que el nuevo modelo de subvenciones europeas "les perjudicará menos de lo que ellos piensan, aunque ahora mismo los ganaderos de carne están muy asustados porque desaparecen los derechos por vaca nodriza y no saben qué es lo que van a cobrar de ayuda".

Además Otero recuerda que no solo estarán las ayudas vinculadas a la superficie, sino que "hay ayudas asociadas a los animales, lo que significa que cobrarán por todas las vacas que tengan, cuando antes ese dinero estaba limitado a los derechos que tuviera el ganadero", subraya la técnica de Aseagro.

Al margen de las subvenciones, los ganaderos aprovecharon el encuentro de ayer para poner en común problemáticas de su día a día. Una de ellas es el saneamiento de los animales, frente a lo que se sienten desprotegidos. Su principal demanda en este aspecto es que se les dé la posibilidad de contrastar los resultados que se obtienen de las campañas de saneamiento. "Se dan casos de animales que dan positivo en el análisis y cuando se repite en el matadero no tienen nada", explica Antonio López. Una queja a la que se suma Manuel Rubio, que no entiende por qué no se pueden repetir los análisis antes de tomar una decisión determinante.

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