Somiedo continúa su batalla en la frontera asturleonesa. El Alcalde del concejo, Belarmino Fernández Fervienza (PSOE), anuncia que la comisión asturiana, formada por miembros de la Corporación y técnicos del Principado, presentará nueva documentación ante la junta de deslinde en la que Somiedo y Cabrillanes (León) se disputan 640 hectáreas en las inmediaciones de Santa María del Puerto, que podrían modificar los límites entre ambas provincias limítrofes.

Somiedo y Cabrillanes llevan quince años en disputa judicial por los pastos que van del mojón 1 al 4, desde El Cornón a Fuente l'Obispo. La última resolución judicial obliga a ambos municipios a reunirse en la localidad somedana para delimitar de nuevo la frontera en base a una Real Ejecutoria del siglo XVIII, presentada por el concejo leonés. "La sentencia no entra en el fondo del asunto y no dice que esos terrenos sean de Cabrillanes, sino que hay que volver a delimitar. Lo que está claro es que Cabrillanes no recupera nada", afirma Fernández.

Además, el regidor somedano manda un mensaje de calma a los vecinos de Santa María del Puerto que tienen propiedades privadas en los terrenos en disputa: "Independientemente del tema administrativo están las fincas de los vecinos, que estén tranquilos porque nadie se las va a quitar ni sus derechos de pasto", sostiene Fernández.

Por otro lado, el alcalde evitó ayer valorar las declaraciones de la Alcaldesa de Cabrillanes de Unión del Pueblo Leonés (UPL), Lina Freire, en las que tachó a Fernández de "mentir descaradamente" o de creerse Don Pelayo en la lucha por la frontera asturleonesa. "Ni el Ayuntamiento de Somiedo ni yo contestamos a esas tonterías", zanjó Fernández. Eso sí, el regidor lanzó un órdago a su homóloga babiana: "Nos encantaría trabajar con Cabrillanes, como hacemos con los concejos leoneses de San Emiliano o Villablino, en favor del desarrollo en nuestros municipios y no en los juzgados, porque es una pérdida del dinero público".

Además, Fernández considera que si todos los municipios de España se acogieran a los documentos de siglos atrás "habría que cambiar todos los límites, ya está bien de molestar a la gente", concluyó.