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Casi todos los difusores del vídeo sexual de Luarca conocían a su protagonista

La joven naviega, que se encuentra bajo tratamiento psicológico, asegura ante la juez que no hubo consentimiento para realizar la grabación

La joven naviega que protagoniza el vídeo sexual grabado sin su consentimiento en las fiestas de San Timoteo de 2010 declaró ayer ante la juez de Luarca que no tenía conocimiento de la grabación, que nunca autorizó la distribución de imágenes de ese momento íntimo, que conoce bien a todas las personas que difundieron el vídeo, excepto a dos, a las que conoce de vista, y que el lugar donde se produjeron los hechos que se grabaron estaba alejado de la fiesta de San Timoteo.

A preguntas de su abogada también comentó que los autores de la grabación y la posterior difusión del vídeo nunca pidieron perdón, y que la utilización de esta película, que se podía visionar en páginas de contenido pornográfico hasta el pasado abril, le ha generado un gran perjuicio social, familiar e incluso laboral.

La declaración de la joven por los hechos que se grabaron en 2010 duró alrededor de tres cuartos de hora. En ese tiempo, la mujer naviega contestó a las preguntas de su abogada y también a las de varios abogados de la parte contraria. La juez no autorizó parte de las preguntas de estos últimos porque no aportaban nada al hecho que se juzga. Estas cuestiones que la titular del juzgado rechazó hacían referencia, como ejemplo, al tiempo que duró la relación sexual grababa sin consentimiento o al interés por conocer si los jóvenes protagonistas del vídeo (el hombre es de Gijón) mantienen contacto a día del hoy.

El caso está en fase de instrucción. Ha generado mucha expectación por las características del hecho que se estudia, por la concienzuda investigación que se ha llevado a cabo y por el número de imputados en la causa, que pasa de la veintena. El abogado de dos de los imputados lamentó ayer la situación y quiso transmitir el pesar de sus clientes por lo ocurrido.

La letrada que defiende a la joven recalcó ayer que "está prohibido" difundir un vídeo íntimo sin consentimiento. El artículo 1974 del Código penal reza que "se impondrá la pena de prisión de dos a cinco años si se difunden, revelan o ceden a terceros los datos o hechos descubiertos o las imágenes captadas a que se refieren los números anteriores. Será castigado con las penas de prisión de uno a tres años y multa de doce a veinticuatro meses el que, con conocimiento de su origen ilícito y sin haber tomado parte en su descubrimiento, realizare la conducta descrita".

La abogada de la joven cree que se debe imputar a todo aquel que difundió el vídeo sin autorización. Pero deja que la Justicia decida quién debe estar en situación de "investigado".

La joven está a tratamiento psicológico. Ayer aportó a la juez de Luarca los informes médicos.

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