Con una paellada popular, que congregó a unas 200 personas, Belmonte despidió ayer sus fiestas de San Antonio que comenzaron el pasado viernes.
La alcaldesa, Rosa Rodríguez, asegura que las fiestas se desarrollaron "bastante bien, aunque el tiempo no nos acompañó en los dos últimos días". Las tormentas del domingo y la lluvia del lunes, aunque molestas, no restaron público a las actividades organizadas. "A pesar de la lluvia, el domingo la carpa estuvo llena para ver la actuación de la orquesta 'Assia', y también tuvo mucho éxito el concierto de los 'Supersingles', que llenaron el campo de fútbol", explica Rodríguez.
Otro momento clave de las fiestas fue su inicio, con el pregón de Pepita Rodríguez, quien fue maestra durante diez años en el municipio y que ayer volvía a estar en Belmonte para disfrutar del último día de fiesta. "Vengo todos los años el lunes, el día que era la jira y el más importante por ser cuando se juntan todos los vecinos", comenta la pregonera, que reconoce que, más allá de la década que estuvo como docente en Belmonte, nunca se desligó del concejo. En su discurso de apertura de las fiestas relató sus experiencias en el municipio, "haciendo recordar a la gente cosas conmigo, como el ambiente que había antes en la villa y las actividades culturales", subrayó.
Muchos vecinos comparten la idea de Pepita Rodríguez de que el lunes es el mejor día de la fiesta. Entre ellos Toni Llagarón, que cierra su establecimiento para pasar un día en familia y con los amigos. "Es la reunión de todo el pueblo, la única vez que nos juntamos, y por eso es especial", comenta.
También marca el final del verano para muchos, "es el final de todas las fiestas, la última bala", explica Eloy García, quien considera que este día es el más "desenfadado de las fiestas" para los vecinos.
Una de las peticiones de fin fiesta que hace la Alcaldesa de Belmonte es que se conforme una comisión de festejos entre los vecinos para lograr una mayor implicación. "Contarían con el respaldo y la ayuda del Ayuntamiento". El día finalizó con la última verbena, a cargo de las orquestas "Cuarta calle" y "Distrito xoven".
