Las sirenas de ambulancias y coches de bomberos irrumpieron ayer en la tranquilidad de la tarde de Cangas del Narcea. Pero no había pasado nada grave. El Prao del Molín se había convertido en el centro neurálgico de un simulacro de emergencias, que se desarrolló dentro de las cuartas Jornadas de Primavera que organiza la Sociedad Asturiana de Medicina de Urgencias y Emergencias de Asturias (SEMES), y en las que participaron 120 personas.

En esta ocasión, los efectivos de seguridad y urgencias se enfrentaron a la recreación de un accidente de tráfico con múltiples víctimas que sucede justo en plenas fiestas locales. Para poner en situación a los 45 miembros del dispositivo de emergencias, la simulación se inició con la tirada de varios voladores. En el Prao del Molín, 15 heridos, casi la mitad de carácter grave, esperaban la intervención de bomberos y sanitarios. En total, participaron tres UVI móviles, una ambulancia de soporte vital básico y una ambulancia colectiva además de Bomberos, Protección Civil y Policía Local. Durante la recreación se puso en práctica, de forma pionera, un sistema de atención que está desarrollando el SAMU para mejorar la atención en accidentes con numerosos heridos.

Además, el resto del día se ofreció formación teórica sobre el manejo de los pacientes politraumatizados, explicando el nuevo código sanitario para asistir un politrauma, con el objetivo de ofrecer formación actualizada en la materia a médicos, enfermeros y técnicos.