El pequeño Álex Parrondo, de San Juan de Prendonés, vivió de cerca el fatal incendio que el pasado diciembre arrasó 2.500 hectáreas de El Franco. "Ahora está todo quemado y casi no quedan árboles", contaba ayer junto a su amigo Héctor Fernández. Tienen cinco años pero saben bien lo que es un paisaje quemado y la importancia de recuperarlo, algo que hicieron ayer junto a sus compañeros del colegio público franquino Jesús Álvarez Valdés. El centro realizó ayer una plantación simbólica de nueve árboles autóctonos en el área recreativa de Pormenande, que después limpiaron. "En el cole trabajamos el cuidado de la naturaleza y como hubo varios críos que vivieron los incendios en primera persona pues empezamos a pensar qué podíamos aportar nosotros, así que decidimos ayudar a regenerar el medio", explica la directora, Ana Pardo.
Los escolares disfrutaron con la plantación y se mostraron muy implicados y concienciados con la tarea. "Estamos plantando árboles para ayudar al medio ambiente", explicó Carlos Fernández. Tras la jornada en Pormenande regresaron al colegio, donde se celebró una jornada de convivencia junto a las familias.
Hoy en La Caridad habrá una nueva actividad solidaria para recaudar fondos para los damnificados por el fuego. Comenzará a las doce con un maratón de aeróbic.
