Tapia de Casariego,

El Festival Intercéltico d' Occidente (Fido) echó ayer el cierre en Tapia a la edición de su vigésimo cumpleaños. "Estamos muy contentos; hubo muchísima gente", valoró ayer el director de la cita, Martín Fernández Cascudo. La organización considera un acierto el adelanto de la celebración y no descarta oficializar el primer fin de semana de agosto como el de la cita celta por excelencia en el occidente asturiano.

El responsable del Fido se mostró especialmente satisfecho por el desarrollo de la Noite Máxica, que regresó el sábado tras varias ediciones ausente.

"Fue espectacular y estuvo lleno de gente", indicó. A las formaciones musicales invitadas este año también les gustó este espectáculo. "Fue una noche muy interesante porque estábamos todas las bandas juntas actuando", resaltó Roberto Giráldez, que preside la banda gallega "Xarabal".

Para los de "Xarabal", una banda que desplazó desde Vigo a 25 músicos, fue su primera vez en Tapia y se marchan encantados: "Tapia es un pueblo pequeño y muy acogedor, que hace que te sientas como en casa".

Giráldez destaca la estrecha convivencia con los otros grupos como uno de los valores de la cita tapiega. Es un factor que también destaca Pablo González, del grupo de danza "Corisco": "Es un festival muy familiar".

Los de "Corisco" ya son habituales en el evento, en el que han actuado en diferentes momentos de su historia. "Como todos los años, el balance es muy positivo, quizás este año mejor porque hubo más grupos de danza, más en nuestra línea", expresó González. Este año la celebración contó con más bandas y grupos invitados que en las ediciones pasadas, lo que las formaciones consideran positivo: "Que haya variedad de grupos está muy bien, para nosotros es interesante porque también aprendemos y conocemos otras culturas", añade Giráldez.

Las bandas se despidieron ayer de la villa con el último desfile "Alborada del mar" en el que participaron los locales de la "Marino Tapiega", "Xarabal", "Corisco" y el colectivo irlandés "Dominic Graham Scoholl of Irish Dance".

El desfile partió del puerto de la villa y terminó en la plaza de la iglesia, donde tuvo lugar la misa folclórica. La organización cumplió además con una de sus tradiciones como es la elaboración de una alfombra a base de sal que reproduce el cartel anunciador del Fido. Tres horas les llevó preparar este manto que engalanó la plaza frente a la iglesia.

Tapia celebró los veinte años de su festival con cinco días de actividad en los que participaron quince formaciones musicales invitadas, procedentes de Asturias, Galicia, País vasco, Francia, Escocia, Irlanda y Chile. La vigésima edición fue la más multitudinaria de la historia y reunió en la capital tapiega a más de trescientos músicos.

La banda de gaitas Occidente, que organiza el Fido, puso el broche de oro a la cita con la última noche folk en el Murallón, que se celebró ayer por la noche y contó con la actuación de "The hidden road" y el músico vasco Xavi Aburruzaga.