Sara Pérez Noriega vivirá mañana el que cree que será uno de los momentos de más nerviosismo de sus 14 años de vida. Ella es la ganadora del concurso literario organizado por la asociación "Amigos de Cudillero" y tendrá que recoger su premio. Su relato titulado "La madre" convenció al jurado. Se presentaron 65 trabajos de alumnos de distintos concejos de Asturias. Ganó el de Sara Pérez, que recuerda a la "Lloca" de Gijón y a las madres y a los emigrantes que no vuelven a reencontrarse hasta que llegan "al más allá".
Sara Pérez pensó en esta historia gracias a su madre. Fue con ella con quien recorrió distintos lugares de Gijón, y fue con ella con quien aprendió a escribir y también a apasionarse por la lectura. "Mi madre lee mucho y además es profesora y me dio clase dos años. Siempre nos decía que escribiéramos un cuento para leerlo en clase. Era muy divertido leer para los demás y conocer las historias de los otros", dice. A Sara Pérez le encanta escribir en plan cómico, pero los trabajos del curso escolar no le permiten avanzar por este camino. "Ahora no puedo leer ni escribir tanto como antes. El tiempo no da para más", dice esta alumna del instituto Selgas de Cudillero que no tiene claro qué carrera estudiará.
Sara Pérez cree en la gente que se esfuerza más que en la gente brillante. "No te puedes rendir a la primera. Tienes que intentarlo varias veces", dice para después contar el secreto que la acercó, en cierta medida y sin saberlo al que es el primer premio literario de su vida. "Primero pensé en la historia, después escribí en sucio y después me quedé con lo mejor. Necesitas tener paciencia para que las cosas salgan bien", indica. Pese al esfuerzo, está muy sorprendida por el fallo. En el concurso participan alumnos de toda la región y la competencia es dura. "Sólo en mi clase hay muchos compañeros que escriben bien", indica. Esta alumna de Cudillero juega, además, en casa y eso hace que estos días lea y relea su relato para no tener fallos mañana, cuando tenga que presentar "La madre" ante centenares de personas. Pero tiene algo a su favor. Como fiel defensora del esfuerzo, sabe que su trabajo tendrá recompensa. Se lo dedicará a su madre. "Suena pedante, pero todo esto se lo debo a ella", concluye.
