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Jarrio, sin cardiólogos desde el viernes, incorpora mañana un profesional

"Tendremos un médico joven y preparado", asegura la gerencia, que reconoce que el centro tiene "un problema histórico" con la especialidad

El cardiólogo jubilado Ángel Gómez. A. M. S.

El Hospital de Jarrio carece, desde el pasado viernes, de cardiólogo. La jubilación de uno de los especialistas, unida a la baja voluntaria en septiembre del otro profesional, han abocado al centro a esta situación. La dirección del centro tranquiliza a los pacientes, y anuncia que mañana se incorporará a la plantilla un nuevo médico dentro de este área y que se mantiene abierta la oferta para sumar otro más. Mientras, varios usuarios han mostrado su indignación ante la carencia de profesionales, que ha llegado a ocasionar problemas tanto en las consultas como en la realización de análisis.

Susana Santamaría, gerente del área I, con cabecera en el hospital coañés, reconoce que el centro funciona sin cardiólogos desde el pasado viernes. "El cardiólogo, el doctor Ángel Gómez, se retiró el pasado viernes. Antes, en septiembre, otra de las profesionales decidió, de forma unilateral, rescindir el contrato. Por lo tanto, pasamos de tener dos a ninguno", explica Santamaría, que asegura que desde la gerencia se han tomado medidas para poner solución al problema: "Este jueves (por mañana) se incorpora un nuevo profesional, joven y preparado. Además, mantenemos abierta una oferta de empleo a través del Boletín Oficial del Principado de Asturias, que se resolverá en los próximos días".

De este modo, la gerencia espera volver a contar con dos cardiólogos, aunque, señala Santamaría, también barajan otra opción. "En caso de contar con uno solo, tenemos capacidad para tratar a los pacientes desde Medicina Interna, a través de una reorganización. Esto es debido a que la mayoría de los pacientes son gente mayor, con varias patologías. Medicina Interna tiene mucha experiencia en ese sentido", asegura la responsable del centro, que confía en que esta misma semana se recupere la normalidad. "Sería muy negativo quedarnos sin este tipo de profesionales. Esta lucha es nuestro día a día", afirma la gerente, que reconoce que el Hospital de Jarrio ha tenido "históricamente" problemas para cubrir esta plaza.

Mientras tanto, han sido numerosos los usuarios que han manifestado su enfado ante esta situación, que en algunos casos ha causado trastornos en la elaboración de análisis o en las consultas. Algunos explican que es un problema que se arrastra desde hace tiempo, y hasta se han llegado a plantear quejas en el servicio de atención al paciente.

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