La Asociación de Amigos del Camino de Santiago de Valdés-Luarca reclama la pronta realización de las obras de mejora del albergue de Cadavedo. La dirección recibió quejas de algunos peregrinos por el estado del edificio y en octubre reunió al gobierno y a los partidos de la oposición para trasladar este malestar. La presidenta, Mary Rico, ofreció entonces soluciones para poder poner fin a las deficiencias de las instalaciones y para mejorar la gestión de las mismas.
Ante los comentarios que el cierre del edificio (que espera por una pronta obra municipal) ha generado en Cadavedo, Rico aclara que en el encuentro se advirtió de la "necesidad urgente de acometer este proyecto de mejora ". En la reunión también se habló de la posibilidad de ampliar las instalaciones, "dado el número cada vez mayor de peregrinos que elige nuestro Camino y que no pernoctan aquí por falta de plazas".
El colectivo considera oportuno que, en primer lugar, se hagan las obras cuento antes. También pide que la gestión del albergue salga a concurso público. Hasta la fecha, los peregrinos dan un donativo opcional. Toda la recaudación se invierte de nuevo en las instalaciones, pero los equipamentos no mejoran y con el paso de los años y la falta de mantenimiento, cada vez surgen más problemas. Rico asegura, no obstante, que, pese a estas dificultades, los peregrinos "siempre reciben buena atención".
La directiva señala, además, que el Ayuntamiento no tiene un trabajador dedicado a estas instalaciones públicas, sino que son personas desinteresadas las que las mantienen abiertas y también en las condiciones de higiene necesarias para poder ser utilizadas.
La aparejadora municipal visitó las instalaciones en enero y documentó la situación del edificio. Rico apunta desperfectos en techos y paredes, así como humedades y goteras. A su juicio, un concurso público de gestión "mejoraría mucho las cosas".
En la reunión de octubre también se reclamó al gobierno un nuevo aseo para el albergue de Almuña y que todos los años se limpie el tramo del Camino que pasa por Valdés justo antes de empezar la temporada alta. La entidad considera que el gobierno debería comprometerse todos los años a través de una partida prevista en el presupuesto. Según la dirección de la Asociación de Amigos del Camino de Santiago de Valdés-Luarca, el concejo valdesano pierde al no atender estas instalaciones porque los peregrinos "son un gran potencial humano, económico y turístico".
