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Lectura sorpresa en Castropol

"La presentación es preciosa y el contenido muy interesante", dicen las familias locales con niños pequeños al recibir las "bibliocajas" de préstamo de la biblioteca

Sabrina Zerkowitz con su hijo Nuno, ayer, descubriendo el contenido de una de las cajas. T. CASCUDO

El pequeño Nuno Zerkowitz, de tres años, descubrió ayer los secretos que encierran las "bibliocajas" ideadas por la biblioteca castropolense Menéndez Pelayo para potenciar la lectura en familia y a edades tempranas. "Cada caja encierra un pequeño trozo de la biblioteca que las familias podrán llevarse a su casa", resume la bibliotecaria Manuela Busto.

Este novedoso proyecto, bautizado "Libros y mimos", nace en colaboración con la escuela de bebés local El Turullón y pretende ofrecer a las familias las herramientas necesarias para compartir con sus hijos menores de 4 años toda la magia de los libros. "Pretende sensibilizar e implicar a padres, madres y demás miembros de la familia en el valor de los hábitos lectores, ayudarles a desarrollar su labor educadora, orientarles y animarles a despertar en sus hijos la afición por el libro", añade Busto.

Cada una de las diez cajas disponibles incluye una selección de libros, juegos y técnicas para jugar e interactuar con los pequeños, además de una pequeña mascota de juguete. Las familias podrán acceder a ellas a través de la biblioteca o de la escuela de bebés, y podrán tenerlas en sus casas durante un mes. El único requisito para participar es que los niños tengan el carné de la biblioteca.

La directora de El Turullón, Alba Fernández, explica que los libros juegan un papel importante en el centro, ya que trabajan por proyectos y cada uno se introduce con una lectura. Considera importante que ese hábito lector se fomente también desde las casas: "Hay padres que lo fomentan mucho, pero otros no tanto, y con esta iniciativa los niños se van a interesar más y va a ser muy útil para las familias".

La mamá de Nuno, Sabrina Zerkowitz, no solo aplaude la labor que desarrolla la biblioteca local, sino que considera muy interesante esta propuesta: "A los niños les encantan los cuentos, que nunca sobran. Además, la presentación de las cajas es preciosa, y el material, por lo que he podido ver, es muy interesante".

En el proyecto también ha colaborado la docente Antonia López, que ha diseñado el logo de "Libros y Mimos", así como la artista local Mónica Beitia, que se ha encargado de la decoración de las cajas. "La cultura no tiene que ser aburrida. He decorado las cajas con combinaciones aleatorias de colores para que fueran muy llamativas", precisa.

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