Era un joven reservado, amable y educado. Nunca tuvo problemas con nadie y se ganó el cariño de pueblo y del concejo de sus abuelos por ser "honrado". Así le recuerdan las personas que conocieron o compartieron momentos con el vecino de Andés (Navia) que falleció el pasado domingo un accidente de moto cerca de Arbón. Alfredo Izquierdo Cuesta tenía 33 años y era un apasionado del mundo del motor. Coleccionaba motos y coches antiguos y su pasión por "rodar" en vehículo de dos ruedas era de sobra conocida en Navia.

La moto que pilotaba en el momento del mortal suceso la compró el pasado septiembre. La motocicleta, de 2009, tenía entonces unos 20.000 kilómetros. Alfredo Izquierdo Cuesta duplicó el kilómetraje en pocos meses. "Conocía la moto y había rodado mucho en ella. De un lado a otro. De Asturias al sur de España. Sé que no se la jugaba", indicó ayer la persona que le vendió la moto, Pedro Piedra. "Yo tuve un accidente con esa misma moto cerca de Boal y afortunadamente no me pasó nada. No sé qué le pudo pasar a él. Desde luego, era un joven con cabeza y que no apostaba más de lo necesario", indicó Prieto.

Alfredo Izquierdo solía hacer las rutas en soledad. No le gustaba especialmente ir en grupo porque así no se sentía comprometido. La velocidad era uno de los motivos de esta apuesta. "Iba a lo suyo por eso. Era prudente", añadió Pedro Piedra. Otro joven motero de Navia que prefiere guardar el anonimato cuenta que Alfredo Izquierdo conocía lo que hacía cuando salía a la carretera. "Era un piloto experimentado y con muchos kilómetros encima. Dudo mucho que hiciera una maniobra extraña", dijo a LA NUEVA ESPAÑA.

A Alfredo Ignacio Izquierdo le llamaban "Asturiano" porque le encantaba el mundo del pueblo y también la mitología asturiana. Decidió mudarse de Oviedo a Navia para cuidar de sus abuelos y en Navia, "en el pueblo, donde le gustaba estar", hizo la mayor parte de su vida.

El joven pasó por una sidrería de Navia el mismo día de su muerte. Se dirigió a Villayón por la carretera AS-25 y a la vuelta tuvo el accidente, en el cual se vio implicado otro turismo. El estado de la moto da fe del fuerte impacto que se produjo.

El accidente tuvo lugar en una recta con visibilidad, razón por la que muchos moteros de la zona no se explican qué pudo pasar.

Alfredo Izquierdo trabajó en Benito Sistemas de Carpintería (Navia) y en la actualidad lo hacía en el almacén de la planta de celulosa en la capital naviega. Sus compañeros de trabajo de Ence-Navia destacaron ayer el carácter conciliador del fallecido. "Nos apena mucho su muerte. Era muy trabajador y nunca tuvo una discrepancia de importancia con nadie", indicaron.

Los padres del fallecido se encontraban de viaje fuera de Asturias en el momento del accidente. El cuerpo del joven fue trasladado al Instituto Anatómico Forense tras el accidente, pero volvió ayer al Occidente. La comarca despedirá hoy a este joven que se ganó el cariño de Navia por su carácter "pacífico".