La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

La biblioteca cumple en Castropol

"Debe ser un centro promotor de cultura, no sólo un sitio al que vas a buscar un libro", defiende la bibliotecaria, Manuela Busto, en el 95.º aniversario de la Menéndez Pelayo

Cartel de animación a la lectura de la primera época.

El 2 de marzo de 1922 abrió sus puertas en Castropol la Biblioteca Popular Circulante (BPC), cuyo objetivo central, según expusieron entonces los fundadores, era "fomentar la propagación de la cultura". Noventa y cinco años después, la biblioteca castropolense -que desde 1945 se denomina Menéndez Pelayo- sigue muy viva y comprometida con los principios fundacionales.

Cuenta la bibliotecaria, Manuela Busto, que cuando llegó a Castropol, hace 27 años, consideró toda una "responsabilidad" hacerse cargo de un centro lector con una historia tan relevante como la Menéndez Pelayo. Y es que, tal y como recoge el doctor en Historia Ángel Mato en su libro "La lectura popular en Asturias", la biblioteca castropolense nació como "un modelo de acción bibliotecaria original y distinto al de los ateneos, organizado por un grupo de particulares, gratuito y enfocado a ejercer su labor en el medio rural con sucursales en los pueblos que acercaban los libros al lector campesino". Es decir, fue pionera y referente en la zona.

Cuenta Busto que el centro "vive un momento importante en cuanto a actividades y uso por parte de los usuarios" y su reto actual, además de completar la informatización del archivo, es "mantener el grado de implicación que en estos 95 años se tuvo con los usuarios e intentar ofrecerles lo mejor con los medios de los que disponemos".

La bibliotecaria defiende la importancia de seguir fieles a los principios fundacionales: "Debe ser un centro promotor de cultura, no solo un sitio al que vas a buscar un libro". En este sentido, el objetivo está más que cumplido, ya que la Menéndez Pelayo es una de las bibliotecas más activas de la comarca. No se hará celebración específica para estos 95 años de historia, al margen del uso del hastag #95AñosEnCastropol. Sin embargo, Busto explica que ya tienen en mente el centenario, para celebrarlo como se merece.

Mucho tiempo ha pasado desde que el 2 de marzo de 1922 el lector Carlos Gayol formalizó el primer préstamo de la biblioteca. Se llevó a casa "La rana viajera", de Julio Camba, iniciando así la actividad de este emblemático espacio por el que han pasado personalidades como Luis Cernuda y Federico García Lorca. El rastro de buena parte de estas visitas se puede seguir en la sección de autógrafos, engrosada desde 2012 gracias a una colaboración con la Fundación Princesa de Asturias, que permite disponer de la obra firmada de los premiados con el "Princesa" de las Letras. Esta sección es, junto al fondo histórico de los siglos XIX y XX, lo más valioso de la biblioteca.

El centro empezó su andadura con 129 libros y en la actualidad suma 26.042. "Es un buen fondo", reconoce Manuela Busto, que cifra los socios por encima de los 2.000, si bien son 300 personas las asiduas del centro.

La biblioteca nació en un local de la planta baja del consistorio y después se trasladó a la casona convertida hoy en consultorio médico. Desde 1993 se ubica en el Teatro Casino de la capital del concejo, en pleno parque Vicente Loriente, considerado el fundador y alma de este centro lector, que gusta "por la luz y la tranquilidad", así como por las excepcionales vistas que ofrece a la ría del Eo.

Compartir el artículo

stats